Halloween 2022: series vampíricas para ver en una noche de terror

La figura del vampiro ha ido adaptándose a los tiempos, pero lejos de perder el atractivo entre las nuevas generaciones, estas criaturas nocturnas siguen despertando el interés entre el público y la industria cultural con historias llevadas al cine, la televisión o los libros. Un icono que en lo audiovisual sigue latiendo fuerte, y es que estos no muertos despiertan curiosidad y arrastran millones de seguidores en torno a su leyenda. La seducción, el misterio y, por supuesto, el terror, son parte clave de lo que rodea a estos místicos personajes, con la sangre de sus víctimas como clave referencial para entender el mito vampírico.

Pasan las décadas, llegan nuevos públicos, se adaptan los mitos a las nuevas referencias cinematográficas pero la esencia se mantiene viva para unos no muertos que vivirán eternamente en el imaginario popular. El género no pierde un ápice de interés y se va renovando, con mayor o menor fortuna y en los que hemos visto de todo, desde vampiros con cremas solares, tenebrosos como el mítico Nosferatu con 100 años de vida, la elegancia de un Drácula eterno y seductor como el de Francis Ford Coppola, los vampiros más guapos que ofrecía “Entrevista con el vampiro”, o los jóvenes aunque sobradamente preparados (y cuestionados) de Crepúsculo, con piel brillante y resistencia al sol, ahí es nada.

El mito sigue más vivo que nunca y nosotros como espectadores deseosos de recuperar sus historias, conocer otras nuevas, viajar por sus cientos de vidas para dejarnos hincar el diente y seguir bombeando sangre a raudales mientras quedamos absortos, con cojín en mano o no, ante sus tenebrosas aventuras en pantalla. En el mes de Halloween, qué mejor qué recuperar, conocer o revivir algunas de las series más destacadas para todo tipo de públicos con las que pasar un “mal trago”.

Sangre juvenil para todos los gustos

Crónicas Vampíricas (HBO Max)

En 2009 nacía Crónicas Vampíricas, una serie que se adaptaba a los tiempos que corrían entonces, con Kevin Williamson al frente, guionista de la original Scream y gurú del terreno juvenil. Con el éxito de Crepúsculo tan solo un año antes y al igual que esta, la serie de CW partía de otro fenómeno literario, las novelas de Stephenie Meyer, donde una adolescente, Elena Gilbert, se enamora de dos hermanos vampiros, Stefan y Damon Salvatore, uno bueno y otro malo. Su guerra particular de tiras y aflojas nos introduce en un legado de personajes de todo tipo en el que también hay espacio para hombres lobo, sangre, amor, violencia y mucha tensión sexual con cliffhangers habituales para una serie que se mantendría hasta 2016 con una octava temporada final a la que nos hemos enganchado jóvenes y otros no tanto, con uno de los tríos amorosos más famosos del streaming.

Los Originales (Netflix)

Como toda serie de éxito, Crónicas Vampíricas empezó a ver sus propias series derivadas. Una de ellas es Los Originales, centrada en los malvados Mikaelson, sí, la familia de vampiros que empezamos a conocer en la segunda temporada de la serie principal, aquí trasladando la narración a Nueva Orleans para conocer o otros vampiros y uniones, deslealtades, amores e historias de chupasangres habituales bajo otro linaje para dar bastante guerra a los Salvatore.

Legacies (HBO Max)

Y seguimos con la expansión del universo de Crónicas Vampíricas. Otro spin-off que en esta ocasión surge de Los Originales, para seguir escarbando en la familia Mikaelson, aquí centrando en la hija de Klaus y Hayley Marshall, siendo uno de los descendientes con más poder entre vampiros, brujas y hombres lobo. La historia vampírica aumenta en número de criaturas infernales siguiendo la estela de la serie predecesora, con ella y las gemelas Josie, Lizzie y Saltzman accediendo a la Escuela Salvatore donde, cómo no, aprenderán más sobre los poderes sobrenaturales que poseen y como lugar de cobijo para toda esa gente joven nacida de las oscuridades. Podemos decir que se trata de una especie de escuela a medio camino entre Harry Potter y X-Men para aprender a controlar conjuros, fuerza y hambre de jóvenes tenebrosos, aunque sobradamente preparados.

Buffy, Cazavampiros (Disney +)

Evidentemente, por ser icono generacional y de culto para muchos, la serie de Sarah Michelle Gellar es de obligado visionado. La serie noventera de Josh Whedon convertida en todo un icono pop, es un clásico televisivo con el que muchos hemos crecido y cuyo reparto, humor y monstruos infernales contra los que debía luchar su protagonista cazavampiros, marcan uno de los mejores shows en forma de serie que nos podamos llevar al cuello.

Su éxito fue tal que conllevó un spin-off como Ángel (Disney +), interpretado por David Boreanaz como uno de los grandes protas de la original. Esta serie paralela conforma otra lucha por parte de su protagonista contra los vampiros en Los Ángeles, con su propia identidad y sentido, para ofrecer un estilo de investigación en donde Boreanaz hace las veces de detective con las que ampliar el mundo de Buffy de forma más personal y solitaria.

Vampire Academy

Aunque de momento en España no la ha adquirido ninguna plataforma, Vampire Academy ya ha llegado a Estados Unidos. La serie, una vez más, se basa en la saga superventas de Richelle Mead, habiendo vendido más de ocho millones de ejemplares en todo el mundo. Para su paso por televisión, la encargada ha sido Julie Plec, de Crónicas Vampíricas.  En ella tenemos ingredientes de sobra conocidos, no por ellos menos “excitantes” como la mitología vampírica, batallas y amistad, donde seguimos la historia de Rose y Lissa, dos jóvenes que llegan a la escuela vampírica St. Vladimir’s Academy después de haber huido dos años antes.

Mundo vampírico adulto

El mundo vampírico adolescente ha ocupado gran terreno en los últimos años, especialmente por su interés tras novelas de éxito para adolescentes. Pero además de los amores juveniles y escuelas de chupasangres, encontramos un terreno de series más adultas en las que lo inquietante, el humor y el terror también nos ofrecen una oferta nada desdeñable que llevarnos a la “boca”.

True Blood (HBO Max)

De lejos, una de las mejores y más inquietantes series que vamos a poder disfrutar en plataforma. Su éxito fue incuestionable, una historia de ritmo lento pero excitante y misterioso, donde se dan la mano acción, misterio, sangre y mucho erotismo, con grandes interpretaciones lideradas por la particular y excelsa Anna Paquin, Stephen Moyer y Alexander Skarsgard. Los libros de Charlaine Harris cuentan las aventuras de Sookie Stackhouse, una camarera que tiene el don de escuchar los pensamientos de los que la rodean, en un mundo en el que los vampiros conviven con nosotros con conocimiento, son muy reales, buscan sus derechos y un lugar en el que vivir aceptados por la sociedad. Con ello, la vida de la joven dará un vuelco de 180 grados y su entorno vivirá aventuras y peligros en los que entraremos de forma lenta pero sin pausa. Uno de los mejores productos televisivos que podemos ver hoy en día.

Penny Dreadful

El mundo tenebroso amplia su universo de personajes en esta serie que mira a los personajes clásicos de terror, Drácula, Dorian Gray y el Doctor Frankenstein en la Inglaterra victoriana. La misma contaba con dos primeros capítulos dirigidos por Bayona y posteriormente otros por Paco Cabezas, además de intérpretes de reconocido calado como Eva Green, Josh Hartnett y Timothy Dalton, en los papeles de una vidente, un pistolero y explorador que, respectivamente y con ayuda del Profesor Van Helsing, tratarán de dar con el paradero de Mina Murray, combatiendo una amenaza sobrenatural que se cierne sobre ellos.

Drácula (Netflix)

Uno de los más notables y recientes legados que podemos encontrar en streaming es Drácula, una miniserie de Netflix. Tres episodios únicamente para historias de hora y media y un tono y ambientación propios del Drácula de Coppola, con un toque muy personal en el que volvemos a encontrar al vampiro más clásico, alejado de nuevas modalidades impuestas por los tiempos, aquí interpretado notablemente por Claes Bang, mostrando un personaje clásico y terrorífico para una historia que recomiendo ver seguida para disfrutar más si cabe de su calidad.

Misa de Medianoche (Netflix)

Sobra decir que Mike Flanagan se ha convertido en uno de los directores más solventes a la hora de jugar sobre seguro con series de miedo. Tanto La Maldición de Hill House como La Maldición de Bly Manor después, son dos de los productos más cuidados de los últimos años. Con su tercer encargo, Misa de Medianoche, Flanagan se introduce en el mundo de los vampiros de diferente y excelsa manera. Nos ofrece una serie de gran cuidado en sus diálogos, el verdadero músculo de esta. Ritmo sosegado, para algunos incluso excesivo, pero completamente necesario para una serie inquietante, terrorífica por momentos y llena de intriga. Encontramos una comunidad necesitada de fe, que ve en la llegada del nuevo sacerdote un revulsivo para reencontrarse como sociedad, amén de los milagros y misterios que empiezan a darse en misas a medianoche que, como bien indica su nombre, esconden algo más que el fervor religioso de una comunidad católica. El paso de los capítulos y cómo vamos conociendo lo que se esconde detrás del sacerdote, con algunos diálogos sobre pasajes bíblicos y muerte, son de lo mejor que podemos ver actualmente.

The Strain (HBO Max/Disney +)

La Trilogía de la Oscuridad que iniciaba ‘Nocturna’ de Guillermo del Toro arrojó la serie The Strain. Un punto de partida diferente y particular, en el que un Boeing desde Berlín aterriza en el JFK de Nueva York con un nutrido pasaje de cadáveres y un ataúd lleno de tierra en la bodega, llegando así el vampiro que conoceremos como “El Amo” con un plan oscuro que se va relevando con el paso de los capítulos de la mano del doctor Goodweather y un prestamista, Abraham Setrajian, quienes comenzarán su particular lucha contra el virus vampírico que amenaza con exterminar al mundo.

Lo que hacemos en las sombras (HBO Max)

El mundo vampírico nunca fue tan original y divertido. El film de 2014 dirigido por Taika Waititi (‘Thor: Love and Thunder’) sirve de partida para crear una comedia en la que seguimos a unos vampiros muy clásicos, Nandor, Laszlo y Nadja viviendo en su antiguo caserón en la vida moderna, donde descubriremos su impacto en la nueva sociedad, todo como forma de “documental” en la que nos van contando cómo viven ellos como figuras de la noche en la actualidad. Actuaciones brillantes y un fino humor que se ríe de la propia figura vampírica y que estrenaba este verano su cuarta temporada. Risas nocturnas.

Van Helsing (Netflix)

Tras pasar años en coma, Vanessa Helsing se despierta en un mundo asolado por una plaga de vampiros, que recuerda a las hordas de zombis de algunas series en cartel. Entre sus sorpresa y conmoción hace fuerza con un grupo de diversos amigos que tratan de luchar contra los enemigos para seguir con vida. La serie cuenta con cinco temporadas, ambientación oscura y mucha adrenalina.

Chapelwaite (HBO Max)

Nos encontramos aquí con una miniserie de exquisita ambientación que viene a ser una precuela de la conocida “El misterio de Salem’s Lot” que cuenta con un excelso Adrien Brody como protagonista. Lo mejor de la misma es su estilo gótico clásico de la vieja escuela, con criaturas nocturnas de todo tipo, lúgubre y con una ambientación sorprendente para una serie dividida en tres actos diferenciados que miran al folk horror y que gustará a los amantes del cine clásico de terror de los 60. Para esta miniserie se ha contado con Peter Filardi, guionista de la aplaudida “Jóvenes y brujas” como showrunner junto a su hermano Jason. Terror gótico al estilo Lovecraft cuya atmósfera y estilo te absorberá.