Fuentes del equipo médico que le atiende han asegurado a Efe tras haber visitado a Tomás en su casa que es complicado prever cuánto tiempo necesitará para recuperarse y han destacado que es una herida muy importante con destrozos musculares.
Han añadido que primero debe cicatrizar la herida y después empezar a trabajar muy duro para potenciar la musculatura de la pierna izquierda.
Han resaltado que el torero "llegó muy animado y contento de estar en su segunda, tercera o primera tierra" e indican que "está muy contento de estar aquí y dispuesto a someterse a todos los trabajos de rehabilitación y a trabajar en serio con la pierna para ya mismo tenerlo en plena forma".
También han precisado que el tiempo de rehabilitación dependerá de cómo funcione toda la estructura muscular del muslo y señalan que la cornada "le ha podido costar la vida", aunque los doctores de Aguascalientes "le salvaron primero la vida y luego la pierna y ahora tiene que recuperar la función de esa pierna".
"Afortunadamente ya lo tenemos aquí y ahora tiene unas duras etapas de rehabilitación", han manifestado tras ver "al paciente y al amigo".
Han definido como muy emotivo el reencuentro con José Tomás tras lo ocurrido al sufrir esa "herida mortal" y que ya esté en Estepona en su casa.
El hermano del diestro, que es fisioterapeuta y vive cerca del torero en Estepona, será el encargado de que la pierna recupere su función.
Vuelta a España
Tomás llegó el jueves al aeropuerto de Gibraltar en un vuelo privado y desde allí se desplazó hasta Estepona. El maestro de Galapagar seguirá la rehabilitación en su propia casa, aseguraron las mismas fuentes, sin precisar si tendrá que acudir a algún centro médico a alguna hora del día.
El diestro, que sufrió una muy grave cornada hace diez días en la ciudad mexicana de Aguascalientes, presentaba buen aspecto, "algo delgado y todavía desplazándose en silla de ruedas, sin embargo, sonriendo a familiares y amigos, muy pocos, que acudieron a recibirle", añadieron las fuentes.
Tomás, que el pasado sábado fue dado de alta en el Hospital de Aguascalientes (México) donde estuvo ingresado todo este tiempo, tomó la pasada madrugada española un avión privado que partió de dicha ciudad, y cuyo vuelo duró unas diez horas.
A pasos "agigantados"
La rehabilitación que llevará a cabo José Tomás estará supervisada por su hermano Antonio, fisioterapeuta de profesión y centrocampista del Unión Estepona, equipo de segunda división B del fútbol español.
Aunque su recuperación se está llevando a cabo "a pasos agigantados", aún se desconoce cuánto tiempo estará José Tomás convaleciente, y menos aún cuándo podrá reaparecer en los ruedos, aunque ya se ha descartado su presencia en Bilbao y Córdoba, donde estaba anunciado los días 23 y 26 de mayo, respectivamente.
Sin embargo, se baraja la posibilidad de que pueda hacer frente a sus compromisos en Las Ventas de Madrid y en la feria del Corpus de Granada, ya en el mes de junio.
El torero José Tomás ha experimentado una evolución "excelente" tras la cornada sufrida en Aguascalientes (centro de México) el pasado 24 de abril. El equipo médico que le atendió desde el primer momento ha estado visitando hasta ayer al matador de toros español en su casa de Aguascalientes, donde también le ha acompañado todos estos días su médico personal, Rogelio Pérez Cano.
Ayuda de un andador
José Tomás, que aún necesita la ayuda de un andador para poder caminar, expresó su intención de viajar a España con su familia y sus colaboradores más cercanos, por lo que será allí donde continúe con la convalecencia y empiece la rehabilitación de su pierna izquierda.
Las fuentes explicaron que la herida que le produjo el toro "Navegante" de la ganadería de Pepe Garfías va "muy bien" y "está muy limpia", aunque la zona permanecerá inflamada unos días. Añadieron que aún no se le han retirado los puntos de sutura en el muslo afectado "porque en este tipo de casos se tarda algunos días hasta que cicatrizan los tejidos", por lo que será en España donde se los retiren.
El segundo toro de su lote le seccionó la arteria femoral profunda y le laceró la arteria y la vena femoral superficiales, además de dañarle la masa muscular. Según el parte médico, el pitón le produjo una herida de unos veinte centímetros de profundidad y el torero sufrió en la enfermería de la plaza un shock hipovolémico "gravísimo" que puso en peligro su vida.