Los padres del bebé fallecido en Roquetas de Mar, Almería, pagaron 100 euros por su mortal circuncisión clandestina

Las autoridades continúan investigando la muerte de un bebé de apenas 40 días de vida en Roquetas de Mar, Almería, tras una circuncisión clandestina. Sus padres han quedado en libertad con cargos mientras el hombre que llevó a cabo la operación ha sido enviado a prisión. Los progenitores le habrían pagado unos 100 euros por esa intervención fatal y a los tres se les investiga ahora por un presunto delito de homicidio imprudente, como informan en el vídeo Patricia Vázquez y Ana Verdejo.

El caso permanece ahora en manos de la magistrada titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Roquetas de Mar, quien ha acordado el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza del identificado como autor de la circuncisión, considerando que concurren indicios de criminalidad.

Tanto es así que, de hecho, se cree que este hombre, que además carecía de formación médica, podría haber llevado a cabo más intervenciones de este tipo de forma clandestina, algo que, desgraciadamente, tampoco es la primera vez que sucede en España.

La jueza sospecha que el detenido hacía intervenciones como la circuncisión por unos 100 euros

Cada año, en nuestro país, los hospitales tienen que atender a pequeños que han sufrido algún tipo de mutilación o circuncisión. Es difícil detectar estos casos y poner cifras porque se producen en la intimidad de los entornos familiares.

En el caso de Roquetas de Mar sobre el pequeño de apenas un mes, fue precisamente en el centro de salud donde se inició el protocolo por una posible agresión al bebé fallecido.

Tras prestar declaración el padre, –porque que la madre no se encontraba en condiciones físicas para hacerlo–, ambos progenitores fueron puestos en libertad provisional.

Frente a ello, sí que entró en prisión el individuo acusado de practicar la intervención médica, con la sospecha de la jueza de que realizaba esta práctica de forma habitual bajo el pago de unos 100 euros, aproximadamente, y todo ello a pesar de no tener la formación profesional adecuada para hacerlo. De hecho, esa cantidad, --cien euros como pago--, figuraría en el auto de ingreso en prisión, según detalla Diario de Almería.

Así, la jueza indaga en los hechos en el marco de la citada investigación por un posible delito de homicidio imprudente, aunque no se descartan otros delitos en este caso.

El detenido por la circuncisión al bebé de Roquetas de Mar no tenía formación médica

El sospechoso de ser autor de la circuncisión que acabó con la vida del bebé en Almería no tenía titulación oficial y tampoco se tomaron las medidas higiénicas necesarias.

En el marco de la investigación, se estudian y se reconstruyen sus pasos para determinar responsabilidades por la circuncisión fatal.

Esta intervención, detalla Catalina Perazzo, directora de Incidencia en Save The Children, ante nuestras cámaras “solamente estaría aceptada cuando se trata de una condición médica, como puede ser la fimosis en los niños o en los hombres”.

Así, la circuncisión es legal en España, pero debe realizarse solo en un entorno hospitalario y quirúrgico.

 “El pene, igual que la vagina y la vulva, son órganos muy vascularizados y hay que hacer una intervención con cuidado”, apunta Pere Barri, ginecólogo en el hospital universitario Dexeus.

De la circuncisión a la mutilación genital femenina

En 2008 y 2011, otros dos bebés, de origen nigeriano, perdieron la vida en nuestro país tras someterse a una circuncisión clandestina por motivos religiosos.

“Más de 2.600 niñas habían sufrido o estaban en riesgo de sufrir ablación”, señala Perazzo.

La mutilación genital femenina sigue afectando en la actualidad a millones de niñas y adolescentes en el mundo. “Es una práctica machista; una violencia contra las mujeres y las niñas. Al final, lo que busca es controlarlas”, denuncia la directora de Incidencia en Save The Children.

Dicha práctica, muy extendida en África, tiene graves consecuencias en la salud de las mujeres e incluso puede llevarlas a la muerte: “En la mayor parte de países africanos más del 90% de las mujeres tiene hecha una mutilación”, detalla el ginecólogo Pere Barri, a este respecto.

Como país receptor, España centra sus esfuerzos en la prevención y la detección para detener, por fin, este tipo de violencia.

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