Barreras químicas, drones y perros especializados, la lucha palmo a palmo contra la peste porcina en Collserola, Barcelona
La Generalitat teme que los jabalíes se desplacen hacia el centro de Cataluña agravando la epidemia de peste porcina
Los factores que favorecen la proliferación de jabalíes: desde la invasión urbana hasta la falta de depredadores
Miembros de la Unidad Militar de Emergencia (UME) trabajan en el rastreo de la 'zona cero' del brote de peste porcina africana (PPA) detectada en Barcelona, donde ya se han confirmado nueve jabalíes muertos por esta infección, todos en el municipio de Cerdanyola del Vallès (Barcelona), con el objetivo de que el patógeno, muy resistente, no salga del perímetro y no se expanda a otros espacios, como granjas de cerdos.
Los efectivos han hecho una prospección por cuadrículas de 300 metros cuadrados, asignadas cada una de ellas a una unidad, en una zona boscosa que está situado entre las autovías C-58, AP-7 y C-16.
Barreras químicas y drones
Los trabajos consisten en contener a los animales con barreras químicas (repelentes) en pasos de fauna y, desde hace dos días, también físicas en pasos subterráneos (por debajo de las autovías), mientras que los Mossos controlan los puentes por encima de las carreteras.
Junto a la UME trabajan también miembros del cuerpo de Agents Rurals de la Generalitat que temen que los jabalíes se puedan desplazar del epicentro de la zona donde se detectó la peste porcina africana (PPA) --un primer perímetro de seis kilómetros entre Sant Cugat y Cerdanyola (Barcelona)-- y lo hagan por el norte, facilitando así la propagación de la enfermedad.
"El peor escenario sería que se nos abriera la enfermedad hacia el centro de Catalunya", ha explicado este miércoles en declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press el inspector jefe del cuerpo, Josep Antoni Mur, que ha señalado que esta vía de salida sería en dirección Matadepera (Barcelona).
Por ello, ha afirmado que se están instalando barreras físicas para detectar posibles movimientos de estos animales, con el apoyo de los Mossos d'Esquadra que vigilan posibles pasos físicos por la noche, además de repelentes químicos para tratar de contener la enfermedad en esta zona, donde los casos positivos ascienden a nueve.
Mur ha señalado que el escenario más favorable, en caso de que los animales se desplacen y puedan propagar la enfermedad, sería en dirección Collserola, ya que según él, acabarían desplazándose hacia Barcelona y hacia el mar: "Aquí prácticamente el problema se acabaría porque es más difícil la expansión", ha dicho.
Para la vigilancia de estos animales se están utilizando unidades a pie, drones de vigilancia nocturna y la unidad canina.
El exceso de jabalíes en Cataluña obligará a eliminar los siguiendo los protocolos. De momento hay un listado de cazadores voluntarios para actuar cuando la Generalitat lo pida. Un tipo de actuaciones que nada tiene que ver con la caza tradicional.
El problema de la peste porcina alcanza también a los bares y restaurantes de la zona que denuncian un cierre que reduce su clientela. Aseguran que se priva la entrada al parque a la gente que viene pasar por aquí a tomar café, a comer, a desayunar.