Inventan una música especial contra la ansiedad en gatos: las razones por las que les calma

  • La canción preferida de los gatos no es de Mozart ni Beethoven, sino más bien una fabricación específica

  • La mezcla de melodías y sonidos producidos por otros gatos ha resultado ser de lo más tranquilizante

Siempre se ha dicho que la música amansa a las fieras, pero no qué clase de música... Ni qué fieras. La clásica calma a muchos animales, por ejemplo, pero no es del agrado de los gatos. Para hacer frente a la ansiedad que nuestros pequeños felinos sienten cuando no queda más remedio que ir al veterinario y evitar que arañen, maúllen y se remuevan de un lado para otro, un grupo de científicos ha puesto todo su empeño en crear la sintonía perfecta. Les relaja, les distrae y ralentiza sus pulsaciones. En cuanto al estilo de la canción, podríamos definirlo como raro. Si quieres juzgar por ti mismo, ¡dale al play!

La música clásica no tranquiliza a los gatos

No es la primera vez que a alguien se le ocurre que quizá la música ayudaría a calmar a los gatos en el veterinario. Es una de las situaciones que más les estresan.

Hasta el momento, muchos clínicos han utilizado Beethoven, Chopin, Mozart... Lo hacen para auscultarlos e y durante intervenciones quirúrgicas. Está demostrado que, a pesar de estar anestesiados, siguen respondiendo de forma fisiológica a las canciones. Pero un estudio publicado en 'Journal of Meline Medicione and Surgery' (JEMS) ha ahondado más en la cuestión, buscando la combinación perfecta de sonidos para que confirmado que su relajación sea máxima.

Tras varias pruebas de investigación se llegó a la conclusión de que la música clásica, aunque relaja a los gatos, no es la perfecta para mantenerlos totalmente calmados. Por ello, los científicos de Lousiana State University (LSU) han invertido meses en buscar una melodía específica que consiguiera evadirles del estrés que supone estar en una sala con personas desconocidas. Y ¡bingo! Ha funcionado.

Así suena la canción preferida de los gatos

La música idónea para conseguir este objetivo es aquella compuesta por líneas basadas en vocalizaciones de gatos afiliativas, lo que entendemos como ronroneos y sonidos de succión. También se dieron cuenta de que incluir frecuencias parecidas al rango vocal felino -que es dos octavas más altos para el ser humano- les resultaba familiar y tranquilizador. Pruébala con tu gato y verás.

¿Cuál fue la respuesta de los gatos?

Tras componer la canción tocaba ponerla a examen. En el proceso de evaluación para ver si los efectos eran eficientes se utilizaron 20 gatos domésticos inscritos en el estudio LSU. Durante 20 minutos, escucharon dos estilos diferentes: música clásica y la melodía fabricada. También probaron a dejarles unos minutos en silencio para contrastar.

Se estudiaron datos relacionados con el comportamiento y la postura corporal de los felinos, y se midieron las proporciones de neutrófilos. Estos son linfocitos de muestras de sangre que pretenden encontrar una respuesta del estrés del sistema inmunológico.

Todos estos datos concluyeron que este tipo de música no solo podría tener beneficios en el bienestar del animal sino que también genera mayor tranquilidad a los dueños al ser conscientes de que sus gatos tendrán una intervención veterinaria más cómoda. Además, para el equipo clínico supone un nuevo avance al poder garantizar las acciones médicas con mucha más precisión.