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¿Alguna vez te han dicho tus padres que tengas cuidado cuando sales de fiesta porque te pueden echar algo en la bebida? Seguro que sí. Y a lo mejor tú te lo has tomando a broma pensando "pero papá, mamá, ¡esas cosas solo pasan en las películas!". Quizás hasta hayas hecho la broma de "¿que hay alguien repartiendo drogas gratis en la disco cuando a mí me las cobran? ¡Que me echen!". Pero lo cierto es que esto no es ninguna broma ni tiene ninguna gracia.
Tampoco vamos a ser paternalistas: hay gente que se droga en las discotecas y gente que vende droga en las discotecas. En Yasss siempre vamos a estar en contra del consumo de todo aquello que pueda hacerte daño, y, sobre todo, del consumo irresponsable de ciertas sustancias. Pero la realidad es la que es, y hay gente joven que fuma, que bebe alcohol o que consume cocaína. La diferencia está en que esas personas son conscientes de lo que están haciendo y han elegido tomar eso. A los que le echan la droga en su bebida no le han preguntado si querían tomarlo.
Existe una gran variedad de sustancias que alguien podría usar para drogarte sin tu consentimiento. Y cada una de esas sustancias podría provocar en ti unos efectos u otros. Y si, además, están mezcladas con otras como el alcohol, el tabaco o la marihuana, los síntomas pueden ser diferentes.
Es decir, en un caso como este, tú eres la única persona que puede controlar si sientes cosas diferentes a las que sueles sentir cuando te tomas una copa, por ejemplo. Al primer síntoma de que algo no va bien deberías actuar. Lo mejor es avisar a tus personas de confianza, aquellas que han salido contigo: amigos, pareja, familia... coméntales que no te encuentras bien.
Según National Institute on Drug Abuse, los síntomas más comunes son mareos, dificultad para hablar o para moverse, dolor de estómago, sueño, visión y audio distorsionado... Si sientes algo así, no tengas vergúenza o miedo de comentárselo a alguien.
Es muy importante que se lo cuentes a alguien que pueda ayudarte, porque podrías llegar a desmayarte o a no darte cuenta de dónde estás o cómo llegar a un sitio. Lo siguiente que deberías hacer es acudir a urgencias y contar lo que ha pasado. No te preocupes, los profesionales sanitarios no están trabajando para juzgarte, si no para ayudarte. Ellos podrán hacerte un análisis para saber qué tipo de sustancias has consumido. Es entonces cuando deberás acudir a la policía para denunciar que alguien te drogó sin tu consentimiento.
En algunos casos, quizás los que más preocupan a las chicas, las drogas se usan para cometer delitos de abusos o agresiones sexuales. Por este motivo, los mismos miembros de la policía recomiendan denunciar siempre, porque la investigación podría demostrar que se ha cometido un delito contra la salud pública a mayores.
Que quede claro: la víctima NUNCA es la culpable de un delito. Eso lo saben hasta los perretes. El mensaje que debe repetirse es: "NO PONGAS DROGAS EN LA BEBIDA DE LA GENTE". Pero la realidad es que hay gente que droga a otras personas sin su consentimiento. Según la investigación de Suzanne C. Swan, profesora de la Universidad de Carolina del Sur, un 8% de los universitarios estadounidenses encuestados afirmaban haber sido drogados. De ellos, el 16,8% afirmó que, bajo el efecto de las sustancias que habían tomado sin saberlo, habían tenido relaciones sexuales no deseadas. Por este motivo está bien tener en cuenta estos consejos del National Institute on Drug Abuse: