El intento de secuestro de Andréi Mostovói, jugador del Zenit de San Petersburgo: "Lo que lo salvó fue su capacidad para analizar la situación"

La madre del futbolista ha contado cómo el futbolista, con ayuda de un amigo, logró zafarse de varios encapuchados que intentaron introducirle en un vehículo
Intentan secuestrar al futbolista Andréi Mostovói, jugador del Zenit de San Petersburgo: cuatro hombres han sido detenidos
El intento de secuestro de Andréi Mostovói, jugador del Zenit de San Petersburgo, continúa siendo noticia ante los nuevos detalles que se van conociendo del momento en que se produjo todo. El futbolista, que fue sorprendido repentinamente justo cuando iba a subirse a su vehículo, consiguió zafarse in extremis de sus asaltantes gracias a la inestimable ayuda del también deportista Alexandr Grakun jugador de hockey y amigo con el que estaba hablando apenas instantes antes de despedirse de él.
Los hechos se produjeron concretamente el pasado jueves 23 de octubre cuando el futbolista caminaba por la isla Krestovsky, en San Petersburgo, en las inmediaciones de una tienda de lujo. En esos momentos, una cámara de seguridad en la zona registró toda la secuencia de lo que iría a ocurrir, algo que resultó clave para que, posteriormente, las autoridades lograsen detener a los implicados, que además habían actuado previamente consumando el secuestro de un empresario para pedir un rescate.
Andréi Mostovói plantó cara a los secuestradores junto a Alexandr Grakun
En las imágenes captadas, concretamente, se aprecia como el futbolista de 27 años discurría por la vía pública mientras hablaba con su amigo, con el que se detiene a escasa distancia de su vehículo antes de, aparentemente, despedirse y marcharse en distinta dirección. Tras ello, Mostovói se dirigió hacia la puerta del conductor de su vehículo, que ya estaba abierto y con las luces encendidas.
Fue en ese instante cuando ocurrió todo: aproximándose por su espalda para abordarlo, un grupo de encapuchados salió inmediatamente de un vehículo negro con cristales tintados que se encontraba estacionado justo en paralelo, separado por una acera, en la vía que transita justo en sentido contrario.
Tratando de que no tuviese opción a reaccionar, se abalanzaron sobre él con la intención de introducirlo en el vehículo del que habían salido, pero con lo que no contaron era con que Alexandr Grakun se daría la vuelta para ayudar rápidamente a su amigo y, haciendo fuerza conjuntamente, les iban a plantar cara.
Tras unos segundos de gran tensión, en los que los encapuchados, todo vestidos de negro, forcejearon contra los dos deportistas para tratar de secuestrar al jugador del zenit, finalmente tuvieron que retroceder y desistir en el intento.
Andréi Mostovói y Alexandr Grakun, lejos de dejarse amedrentar, consiguieron repeler la agresión, propiciando que los delincuentes se marchasen justo por donde habían venido, subiéndose a su vehículo, que aceleró la marcha después de que el centrocampista del Zenit se marchase del lugar junto a su amigo.
La madre de Andréi Mostovói bendice sus “piernas de oro”
Tras lo ocurrido, la madre del propio futbolista se pronunció en declaraciones al diario KP-Petersburg explicando el suceso: “Lo que lo salvó fue su capacidad para analizar la situación en una fracción de segundo. Logró reducir a los secuestradores física y mentalmente, dejándolos inconscientes. Estos terminaron huyendo en estado de shock. Andrey, por supuesto, tiene piernas de oro. Pudo escapar rápidamente", ha declarado, en un relato de los hechos un tanto hiperbólico, cabe mencionar, habida cuenta de lo que se aprecia en las imágenes, –y aunque ello no reste el valor que tanto Mostovói como Grakun tuvieron para enfrentarse al grupo de encapuchados–.
Concretamente, y según medios rusos, fueron tres hombres los que asaltaron al futbolista en ese momento, pero la reacción que encontraron frustró todos sus planes.
Varios detenidos tras el intento de secuestro
Tras lo ocurrido, y después de la puesta en marcha de una investigación para seguir su rastro, las autoridades rusas lograron la detención de los delincuentes, todos ellos sospechosos tanto del ataque contra Andréi Mostovói como del secuestro consumado del yerno de un político local, identificado como Sergei Selegen.
En su caso, lograron raptarlo y exigieron una cuantiosa suma de dinero por su rescate, algo que llevó a que las autoridades, cuando se iba a producir el intercambio, lograsen detener a un total de cuatro hombres, y un quinto después.
Según el Comité de Instrucción de Rusia (CIR), tras lo ocurrido y tras estos encapuchados se encuentran unos estudiantes de una universidad local, en la región de Leningrado, que habían sido expulsados de la institución.
Andréi Mostovói, goleador en su partido después del ataque
Después del intento de secuestro, Andréi Mostovoi, por su parte, lejos de achacar el susto, salió de titular con el Zenit en su partido contra el Dinamo de Moscú tres días después del suceso, el 26 de octubre, marcando un gol que impulsó la remontada del encuentro.
Agrandando aquello que ha manifestado su madre sobre las “piernas de oro” de su hijo, el centrocampista puso el 1-1 en el marcador, igualando el partido tras el tanto previo rival, anotado por João Paulo Bitello. Después, marcar Gustavo Mantuan, en el 71, materializaría el que sería el tanto de la victoria del Zenit, que se impuso así por 2-1.