El grupo logró el resultado positivo a pesar de registrar pérdidas operativas por la subida del precio del combustible, gracias a la plusvalía derivada de la integración de Iberia en la IAG que se cifra en 83 millones de euros, importe fijo para el resto del ejercicio.
Los ingresos alcanzaron 3.636 millones de euros, lo que supone un incremento del 15,4 % respecto al mismo período de 2010, gracias a un mayor volumen de tráfico, especialmente en la clase de negocios, impulsado por el aumento del volumen de capacidad (un 9,1 %), destacó el consejero delegado de la IAG, Willie Walsh.
Los ingresos por pasaje se situaron en los 3.018 millones, un 14,9 % más, mientras que la facturación del negocio de carga avanzó un 24,5 %, hasta los 290 millones de euros.
Entre enero y abril, el grupo transportó 15,88 millones de pasajeros, un 6,8 % más, gracias a los avances en las rutas europeas (del 10 %) y a Estados Unidos (del 13,5 %), sus dos principales mercados con 3,7 millones.
Paralelamente, consiguió una reducción significativa de los costes, con una reducción de los costes unitarios -excluidos gastos de combustible- del 5,2 %, en tanto que el coste del combustible se elevó un 31 % hasta los 1.128 millones de euros frente a 862 millones en 2010, por lo que sigue siendo el gran desafío al que se enfrenta el sector aéreo, señaló Walsh.
A este aumento del coste del queroseno -en términos unitarios, ha crecido un 20,1 %- se tiene que añadir durante el 2011 el impacto que tiene el terremoto de Japón, y los conflictos de África y Oriente Próximo, que a su juicio pueden suponer cerca de 100 millones de euros negativos para la cuenta de resultados.
Los gastos de combustible estimados para todo el ejercicio -teniendo en cuenta los precios de mercado actuales del combustible, los tipos de cambio y los instrumentos de cobertura contratados- serán alrededor de 5.200 millones de euros, 100 millones por encima de la previsión realizada por la compañía en el trimestre anterior.
No obstante, el grupo ha conseguido recuperar un 50 % del impacto del combustible en el trimestre a través de iniciativas de ingresos.
Pese a ello, la IAG espera este año un crecimiento significativo en el resultado de explotación asociado a mejoras tanto de ingresos unitarios, como por el comportamiento de los costes, dada una significativa fortaleza de los tráficos en la clase business.
Otro reto sigue siendo el mercado europeo de corto radio que tiene una dinámica altamente competitiva, por lo que Iberia mantiene la idea de buscar una solución con la creación de una nueva línea aérea, que hasta hora no se efectuó por no alcanzar un acuerdo con los pilotos, indicó su consejero delegado y directivo de IAG, Rafael Sánchez Lozano.
Por ello, la compañía tiene un convenio con Air Nostrum y Vueling para cederles rutas de corto y medio radio que Iberia no quería continuar manteniendo en la temporada de verano, y en invierno verá si se retoman o si las sigue cediendo a esas dos aerolíneas.