Al finalizar la sesión en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en marzo restaban 2,58 dólares (6,87%) y casi neutralizaron el alza de más de 3 dólares que habían registrado el viernes pasado.
Los contratos de gasolina para marzo concluyeron la jornada a 1,11 dólares por galón (3,78 litros), 9 centavos menos que en la sesión anterior y los de gasóleo de calefacción para ese mes se abarataron 12 centavos, para finalizar a 1,18 dólares/galón.
El gas natural para marzo recortó 25 centavos al precio del viernes y concluyó a 4,20 dólares por mil pies cúbicos.
El mercado neoyorquino reanudó hoy la actividad con una fuerte tendencia bajista en los precios del crudo y de los combustibles, en paralelo al notable descenso que registraba la Bolsa de Wall Street, lastrada sobre todo por las pérdidas en las acciones de las entidades financieras y de General Motors.
Ese fabricante de automóviles y su rival, Chrysler, deben presentar hoy al Departamento del Tesoro de Estados Unidos detalles de los planes de reestructuración que piensan aplicar para poder acceder a más ayudas federales y tratar de sobrevivir a largo plazo.
El fuerte descenso de los precios del crudo y de los combustibles no se interrumpió siquiera con la perspectiva de que el presidente de EE.UU., Barack Obama, convertiría hoy con su firma en ley el plan de estímulo que aprobó el viernes el Congreso, de casi 790.000 millones de dólares y que se espera contribuirá a reavivar la economía de este país y el empleo.
El abaratamiento del crudo de Texas ocurre un día después de conocerse que la economía de Japón, considerada la segunda mayor del mundo después de EE.UU. y que importa la mayor parte del petróleo que necesita, retrocedió entre octubre y diciembre un 12,7% respecto de igual periodo del año anterior y un 3,3% en relación al trimestre previo.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), la Agencia Internacional de la Energía (AIE) y el Departamento de Energía de EE.UU. revisaron a la baja en días recientes sus previsiones de demanda mundial de crudo para este año y coinciden en que será inferior a la de 2008, debido a la ralentización económica.
El descenso de la actividad económica y en el consumo de combustibles ha favorecido un incremento de las reservas almacenadas en EE.UU. y en otros países industrializados, lo que podría llevar a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) a rebajar aún más sus cuotas de producción el mes próximo, según los expertos.