España, entre los países europeos donde los jóvenes tardan más en emanciparse: la media es de 30,4 años

Los principales problemas para emanciparse son la inestabilidad laboral y el precio de la vivienda
Solo el 7% de los jóvenes logró acceder a las ayudas públicas para la vivienda
Un 34% de los españoles estaría dispuesto a cambiar de ciudad en busca de mejores condiciones
El II Informe sobre Jóvenes y Vivienda, elaborado por CENTURY 21 España durante el mes de enero de 2025, revela que el 27% de los jóvenes españoles de entre 20 y 40 años aún no ha podido emanciparse debido principalmente a la precariedad económica, los bajos ingresos y el elevado coste de la vivienda, lo que dificulta considerablemente su independencia residencial. El estudio muestra cómo los jóvenes emancipados, aunque representan el 73%, también enfrentan dificultades económicas significativas y realizan grandes sacrificios personales y financieros para mantener su autonomía.
CENTURY 21 España desarrolla este informe con el propósito de exponer las barreras estructurales que afectan a la juventud española en el acceso a la vivienda, buscando generar conciencia sobre la necesidad de soluciones flexibles y accesibles para facilitar la emancipación juvenil a medio y largo plazo.
Ineficiencia de las ayudas públicas para a la vivienda
Según el II Informe sobre Jóvenes y Vivienda elaborado por CENTURY 21 España, uno de cada cuatro jóvenes españoles entre 20 y 40 años aún no ha logrado independizarse, cifra que aumenta hasta el 55% entre los menores de 27 años.
El principal obstáculo es el alto precio de la vivienda, citado por el 80% de los jóvenes, seguido por la insuficiencia de ingresos (65%) y la falta de ahorro inicial para poder aportar la entrada necesaria (54%). Aunque la mayoría estima que necesitará entre 5 y 15 años para poder comprar su primera vivienda (49%), el 31% de quienes tienen entre 36 y 40 años cree que nunca podrá hacerlo.
En este contexto, el 65% considera insuficientes las ayudas públicas existentes para facilitar su emancipación y tres de cada 10 afirman que, aunque prometidas, dichas ayudas rara vez llegan a materializarse.
Compartir piso, una realidad para la mayoría
Aunque el 37% preferiría vivir solo, casi la mitad (46%) asume que tendrá que compartir vivienda con su pareja, mientras que otro 20% considera inevitable compartirla con amigos, compañeros de trabajo o estudios.
Respecto al tipo de régimen habitacional al que aspiran, el 39% apuesta por comprar una vivienda mediante hipoteca, porcentaje que aumenta hasta el 48% entre quienes tienen entre 28 y 35 años. Paralelamente, cuatro de cada 10 jóvenes contemplan vivir de alquiler, destacando especialmente la franja más joven (20-27 años), donde este porcentaje se incrementa hasta el 44%.
A la hora de elegir vivienda, los jóvenes españoles priorizan la accesibilidad económica, una ubicación bien comunicada por transporte público y la proximidad a servicios esenciales. Sobre la movilidad futura, el 57% desea continuar viviendo en la misma ciudad durante los próximos cinco años, mientras que un 34% estaría dispuesto a cambiar de ciudad o país si obtiene mejores oportunidades laborales (46%) o mayor calidad de vida (45%), porcentaje que llega al 58% entre los jóvenes de 28 a 35 años.
Sin embargo, y a pesar del deseo de emancipación, más de la mitad (58%) no está dispuesta a renunciar a gastos como la compra o renovación de dispositivos móviles, plataformas en streaming (60%) o actividades de ocio como viajes y eventos culturales (61%), aun sabiendo que esto facilitaría su independencia.
El informe también revela percepciones generacionales significativas: los jóvenes consideran que sus padres hicieron grandes sacrificios para independizarse, principalmente destinar gran parte de sus ingresos en la entrada de la vivienda (38%), renunciar a viajes o vacaciones deseadas (31%) o decidir formar una familia como estrategia para salir del hogar familiar (29%).
Ricardo Sousa, CEO de CENTURY 21 España, comenta: "La emancipación juvenil sigue condicionada por factores estructurales. El acceso a la vivienda no solo depende del precio, sino también de la capacidad de ahorro y la estabilidad laboral. Necesitamos soluciones habitacionales más flexibles para que los jóvenes puedan independizarse sin comprometer su futuro financiero”.
El coste de la emancipación obliga a renunciar actividades personales
El 73% de los jóvenes españoles de entre 20 y 40 años vive independizado, pero solo el 30% lo ha conseguido de manera individual. La estabilidad laboral es algo más frecuente en este grupo, ya que un 74% cuenta con contrato indefinido, sin embargo, casi la mitad (46%) percibe ingresos mensuales entre 1.200 y 2.000 euros.
La carga económica asociada al acceso a la vivienda es alta. El 40% vive en una vivienda propia con hipoteca, mientras que tres de cada 10 residen en alquiler. Para adquirir su vivienda, el 35% recurrió a ahorros personales, mientras que el 21% combinó sus ahorros con el apoyo económico de sus progenitores. Solo un reducido 7% consiguió acceso a ayudas públicas autonómicas, las cuales el 70% no utilizó principalmente por la complejidad del proceso (16%), la falta de cumplimiento de requisitos (35%) o porque no las necesitaban (19%). Los jóvenes entre 20 y 27 años fueron quienes mostraron más interés en estas ayudas, aunque un 23% encontró dificultades para obtenerlas.
La emancipación implica sacrificios importantes: el 85% afirma haber reducido significativamente su capacidad de ahorro o haber limitado actividades como viajar para hacer frente al coste de la vivienda. A pesar de haber alcanzado la independencia habitacional, un 15% lleva menos de tres años emancipado y el 39% no prevé cambiar de vivienda próximamente. Entre quienes sí contemplan un cambio, el porcentaje se dispara hasta el 76% en aquellos que viven de alquiler y al 82% en jóvenes entre 20 y 27 años.
“Aunque la mayoría de los jóvenes españoles logra finalmente emanciparse, este informe deja claro que el precio que están pagando es muy alto. La independencia les obliga a renunciar al ahorro, a reducir sus expectativas y, en muchos casos, a vivir en condiciones por debajo de sus necesidades reales. Desde CENTURY 21 España creemos fundamental impulsar alternativas habitacionales y medidas estructurales que permitan a los jóvenes vivir con dignidad y estabilidad económica, sin comprometer su futuro”, comenta Ricardo Sousa.
Las condiciones de los habitáculos
En cuanto a la vivienda actual, el 68% reside en hogares inferiores a 100 m2, el 45% tiene viviendas de tres habitaciones y un 51% cuenta con un único baño. Además, el 39% carece de espacios exteriores como terrazas o balcones y el 50% considera insuficiente la eficiencia energética de su hogar. Un 14% reside en zonas alejadas de servicios esenciales, y el 26% tarda entre 30 minutos y una hora en desplazarse al trabajo diariamente.
Del “affordable housing” al “affordable living”
España es uno de los países europeos donde los jóvenes tardan más en emanciparse, según datos del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España (primer semestre 2024). La edad media de emancipación en España alcanza los 30,4 años, frente a los 26,4 años de media en la Unión Europea. Solo Croacia, Eslovaquia y Grecia registran cifras más altas.
En este sentido, y a la vista de estos datos, Ricardo Sousa destaca la necesidad de cambiar de enfoque: “para facilitar verdaderamente el acceso a la vivienda, es esencial pasar del concepto de vivienda asequible (affordable housing) a un modelo más integral y sostenible: el affordable living. El acceso a una vivienda digna no debería ser un obstáculo para que los jóvenes puedan construir su futuro. La emancipación es un pilar fundamental en el desarrollo personal y profesional de cualquier generación, y su retraso impacta no solo a quienes lo viven en primera persona, sino al conjunto de la sociedad y la economía del país”
Para ello, CENTURY 21 España propone impulsar alternativas como el coliving, cooperativas habitacionales o alquiler con opción a compra, mejorar la conectividad urbana y promover políticas fiscales y ayudas directas para jóvenes familias.
“La transformación no depende solo de los jóvenes, es un reto colectivo que involucra a administraciones, empresas y ciudadanos y que debe garantizar que los jóvenes puedan construir un futuro en nuestras ciudades sin renunciar a su calidad de vida. En CENTURY 21 España estamos comprometidos con este cambio y seguiremos impulsando soluciones que permitan a las nuevas generaciones alcanzar su independencia y su bienestar habitacional, personal y de vida” concluye Sousa.
Desde CENTURY 21 se ha desarrollado este informe con un doble propósito: diagnosticar con datos concretos la situación real de los jóvenes en relación con el mercado inmobiliario y aportar información clave para que todos los actores implicados—sector inmobiliario, administraciones públicas y sociedad civil—puedan trabajar en soluciones efectivas y sostenibles.
La compañía continúa, así, su compromiso con la transformación del sector inmobiliario y la búsqueda de soluciones innovadoras que permitan avanzar hacia un mercado más accesible, flexible y adaptado a las necesidades reales de la sociedad. Porque hablar de vivienda es hablar de oportunidades, estabilidad y futuro.
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