Beatriz Artolazabal, caricaturizada como Hitler, denuncia un “nuevo episodio de acoso” de los jardineros de Vitoria

La concejal aparece en los panfletos con un bigote como Hitler.. Redacción Euskadi
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Vitoria-GasteizCaricaturizada con el bigote de Hitler y tildándola de fascista. Así son los panfletos que ha encontrado una concejal del Ayuntamiento de Vitoria esparcidos junto a la vivienda donde reside, en un pueblo cerca de la capital alavesa. Un ataque que ya ha advertido pondrá en manos de la policía.

Se recrudece el conflicto laboral, entre los jardineros y Beatriz Artolazabal, que ha denunciado “un nuevo episodio de acoso”, por parte de los empleados de Enviser, subcontrata municipal que se encarga del mantenimiento de parques y jardines, y que, en unos días, cumplen seis meses en huelga.

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A lo largo de este casi medio año, han sido varios los ataques que la política del PNV ha puesto en manos de la Ertzaintza para que lo investiguen porque “esta campaña de acoso sobrepasa todos los límites democráticos”.

El lanzamiento de panfletos en los que aparece caricaturizada como Hitler y en los que se puede leer “Fascista. Ese no es el camino” ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de la concejal que ha entonado un ‘Nahikoa da’ (Ya basta, en castellano).

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En sus redes sociales, la concejal del Ayuntamiento vitoriano ha adjuntado las imágenes de los panfletos esparcidos, junto a su casa, y ha explicado que “esta mañana he vuelto a sufrir un nuevo episodio de acoso. Un hecho intolerable que pondré de nuevo en manos de la Policía dentro de la investigación abierta. Esta campaña de acoso sobrepasa todos los límites democráticos”.

Quemada en la hoguera

A los pocos días de comenzar la huelga, Artolazabal denunció que los jardineros fueran a “mi pueblo, de 40 vecinos, a mi casa a poner pancartas” y advirtió que no le iban a intimidar y que con su familia había cosas que no iba a permitir. Denunció el acoso y puso el caso en manos de la policía. En junio, cuando se cumplían tres meses de huelga, la polémica se desató por la quema de un muñeco, vestido con el uniforme de jardinero, y con la cara de la jeltzale en la hoguera de San Juan, en el barrio de Judizmendi.

El último episodio coincide con los seis meses de conflicto laboral, y se produce después de que el Ayuntamiento de Vitoria acometiera los trabajos de acondicionamiento de las campas de Olarizu, donde el próximo lunes 15 de septiembre, se celebra la tradicional romería. Los sindicatos denunciaron ante la Inspección de Trabajo y Gobierno Vasco que investiga lo ocurrido.