Incendios

Las llamas arrasan A Caridade, en Ourense, y los vecinos denuncian que se sienten abandonados: "¡Nos dejaron arder!"

El fuego ha calcinado una veintena de casas en la pequeña aldea de A Caridade, en la provincia de Ourense. Informativos Telecinco / Imagen: Sandra Almeida
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La ola de incendios forestales que en estos momentos asola Galicia, sobre todo la provincia de Ourense, deja viviendas en llamas, animales muertos, personas que se afanan para ayudar en el combate del fuego y aldeas arrasadas como la de A Caridade, informan María Jesús Argibay y Antía Araújo. Allí, los vecinos se sienten "indefensos" y "abandonados" y echan en falta más medios a pesar del despliegue. "¡Nos dejaron arder!", resaltan en medio de la indignación.

Las llamas han calcinado más de 22.000 hectáreas en los últimos días en la comunidad gallega, más de ocho veces la superficie total quemada en 2024 -que fue uno de los años más benévolos desde que hay registros-. Toda la provincia se encuentra en situación 2 de emergencia y en ella trabajan también medios de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y de Portugal.

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Por otra parte, tal y como ha indicado el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, han llegado dos aviones cisterna enviados por la Unión Europea (UE), tras la solicitud de refuerzos por parte de España.

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A Caridade, imagen de la devastación

Los habitantes de A Caridade denuncian que las motobombas que habían acudido a la localidad se marcharon cuando el fuego amenazaba las casas, y han criticado la organización de los medios contraincendios. Los bomberos forestales que se juegan la vida, y que trabajan sin descanso, aseguran encontrarse exhaustos.

A este pequeño núcleo, cerca de Verín, llegó en la tarde de este miércoles el incendio que comenzó en Oímbra-A Granxa, que sigue activo y ha arrasado ya 5.000 hectáreas. No hubo orden de evacuación ni desalojos, según explica Manuel, que considera que la desgracia se podría haber evitado y que la situación ha sido un "caos tremendísimo".

"Me he quedado sin nada", lamenta muy afectado este vecino tras haber pasado toda la noche sin dormir. Su vivienda se ha salvado "de milagro", pero dos decenas de construcciones de la aldea y varios vehículos han caído pasto de las llamas.

Una señora, muy emocionada, señala que está "dolida" por ver que "toda su casa, donde crié a mis hijos, está quemada". El paisaje es desolador y, con lágrimas en los ojos, los ciudadanos contemplan el horror que les rodea y que fue causado en apenas "una hora u hora y media".

"Trabajamos toda la vida en el campo como trabajadores que somos, ¿cómo se recupera ahora todo eso?", se pregunta otra de las 15 habitantes de la aldea. Ahora sólo quedan los recuerdos de toda una vida perdidos en un incendio que ha reducido sus hogares a cenizas.

Sólo en la provincia de Ourense se desplegaron más de 900 efectivos y 31 medios aéreos, según avanzó el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda. Pero en las zonas afectadas por el fuego, hay vecinos que no están conformes y creen que la respuesta ha sido insuficiente.