En la mente de los cinco pasajeros del Titán, el submarino del Titanic: tres estrategias de supervivencia y solo una es válida

Cinco millonarios agotan las escasas reservas de oxígeno del submarino Titán en el que han quedado atrapados a casi 4.000 metros de profundidad en un viaje turístico extremo para ver los restos del Titanic hundido en el Atlántico norte hace 111 años. Con el tiempo jugando en contra de su supervivencia, la mente de estas cinco personas, un padre y su hijo, un explorador experimentado, el propietario de la empresa del submarino y un turista espacial, se enfrenta a retos que los psicólogos intentan explicar y analizar.

"Negación, disociación o el afrontamiento"

Informativos Telecinco se ha puesto en contacto con varios profesionales para intentar saber qué pasa por la mente de estas cinco personas cuya vida depende de otros. Encerrados en un espacio reducido, sus diferentes trayectorias vitales intervienen en un proceso de supervivencia, pero también de aceptación del riesgo real de un muerte inminente.

Las psicólogas Elena Almodóvar y Cecilia Martín coinciden en lo singular de esta situación, por lo que es complicado ponerse en sus mentes y tratar de analizar lo que sienten cada uno de ellos en este momento. Son cinco personas con experiencias vitales muy diferentes, pero embarcadas en un viaje extremo que dice mucho de cómo afrontan la vida. Almodóvar destaca la mezcla de emociones que pueden invadirlos y que van del miedo a la esperanza pasando por la rabia, sin olvidar momentos de abandono o pánico. Un sentimiento este último "que tiene una duración determinada por lo que llega un momento que toca techo y no puede ir a más. Entonces genera una especie de resignación creando una alternancia de sentimientos contrapuestos muy difíciles de gestionar".

Cecilia Martín hace hincapié en que ante este caso extremo todos reaccionamos dependiendo "tanto de nuestra personalidad como de nuestras experiencias previas", pero que, básicamente, el comportamiento ante situaciones como esta responde a estrategias que pueden pasar por la negación, la disociación o el afrontamiento".

Martín, directora del Instituto de Psicología Psicode, intenta meterse en la mente de Hamish Harding, Stockton Rush, Paul-Henry Nargeolet y Shahzada y Suleman Dawood para tratar de conocer cuál de esas estrategias elegirá cada uno de ellos para enfrentarse al miedo y la evidencia de una muerte cercana e inminente si no hay rescate extremo.

¿Quiénes apostarán por la estrategia del afrontamiento para sobrevivir?

Los exploradores y aventureros, Hamish Harding y Paul-Henry Nargeolet probablemente sean los más preparados mentalmente para enfrentarse al reto de sobrevivir, aunque sepan que nada dependa de ellos. Ellos estarán más cerca de la estrategia del afrontamiento que el resto de sus compañeros ya que "en lugar de pensar en la catástrofe que tienen por delante, lo que harán es pensar de una manera superproductiva en soluciones prácticas para afrontar la situación". Esta "autosuficiencia" es "típica de personas que están continuamente dando ideas para resolver la situación".

Sus profesiones y experiencias previas "nos permiten intuir que son personas con muchos recursos de afrontamiento ante situaciones estresantes, porque en su día a día para conseguir sus objetivos profesionales han tenido que vivir situaciones así". Pero sin olvidar, según la experta, que "estamos en una situación crítica donde la sensación de muerte es inminente. Eso puede cambiarlo todo y pese a que estemos ante personas muy eficaces, pueden bloquearse en esa situación".

Una situación parecida es la que pude vivir Stockton Rush, consejero delegado de OceanGate, la empresa propietaria del submarino Titan, cuya trayectoria empresarial para enfrentarse a retos y superarlos en situaciones de negociaciones extremas le ayudaría a anteponer el miedo a la necesidad de salvar a la tripulación y con ello el futuro y la viabilidad de la compañía que dirige.

"Hamish, Paul-Henry e incluso Stockton están preparados para situaciones así, pero también tienen derecho a bloquearse porque emocionalmente es muy difícil de encajar cuando la muerte está ahí mismo", asegura la directora del Instituto de Psicología Psicode.

Las preguntas que destrozarán a Shahzada Dawood por llevar a su hijo en el submarino Titán

El caso más complicado es el del millonario paquistaní, Shahzada Dawood y su hijo Suleman. Padre e hijo se embarcaron en esta aventura transmutada ahora en tragedia. Precisamente este vínculo paterno filial es el que estará pesando en su mente de una manera más onerosa.

Cecilia Martín cree que mentalmente se dan todas las circunstancias para que Shahzada desarrolle un poderoso sentimiento de culpabilidad y responsabilidad que le lleve a plantearse "por qué llevó a su hijo a una experiencia donde hay la opción de que muera".

Es terrible ponerse en la mente de un padre acercándose a los últimos minutos, a las horas últimas de su posible muerte con ese "sentimiento de culpa, que posiblemente le tengan muy bloqueado. Es el sentimiento de haber sido responsable de la muerte de su hijo con las consecuencias que eso va a generar en su pareja, que perdería a sus dos seres más queridos", algo para lo que, según Cecilia, "psicológicamente no estamos preparados". Se trata, concluye de "uno de los acontecimientos que más cuesta sobrellevar".

Ambas expertas coinciden que dentro de la historia del intento de rescate del Titán, lo que ocurra en el interior del submarino tendrá un papel escaso aunque no menor en el desenlace. La reciente aventura de los niños rescatados en la selva de Colombia nos sirve de ejemplo para ilustrar cómo el conocimiento, la preparación y la experiencia son importantes a la hora de sobrevivir, aunque en este último caso -que acabó de forma feliz- esta dependiese mucho más de sus capacidades que de elementos externos.

El estrés postraumático, al secuela más probable si logran rescatarlos

El rescate de los cinco pasajeros del submarino Titán es una cuenta atrás contra la muerte. Nadie pierde las esperanzas, pero tampoco habla de probabilidades de éxito. La Marina de los EEUU habla de un 1%. Los plazos se estrechan hasta llegar a este jueves, el día crítico en el que el oxígeno se agotará. La experiencia puede ayudar a racionar y controlar emociones que consumen gran cantidad de energía y acortan los plazos robando minutos a las labores de rescate.

Si hay éxito y los cinco son rescatados, el futuro, según Elena Almodóvar y Cecilia Martín, estará marcado por el estrés postraumático, una respuesta que ocurre cuando una persona tiene la sensación de muerte inminente ante una catástrofe. Los síntomas no aparecen en el momento, sino a posteriori, semanas después o incluso meses. Sería una nueva vida con activación continua, ansiedad y sobresaltos ante situaciones cotidianas. Eso iría acompañado de problemas de sueño, pesadillas, y recuerdos del momento fragmentados y descolocados.

Almodóvar apunta también otra variable dependiendo de la fortaleza mental de cada uno de ellos si sobreviven y es que "es posible que puedan sacar una lectura positiva de lo que les ha pasado y empezar a valorar más la vida al verla de otra manera. Es decir, que quieran "vivir más el momento, hacer cosas que, a lo mejor, que no se han atrevido hasta ese momento; cosas más relacionadas con las relaciones personales y los afectos".

En cualquier caso, los cinco, en el caso de sobrevivir, tendrán que someterse a una intensa terapia ya que el estrés postraumático puede durar toda la vida. Personas que hace años vivieron un acontecimiento así todavía siguen reexperimentando el miedo, la angustia o el pánico a través de olores o imágenes, sensaciones de gran intensidad que vuelven a poner su vida contra las cuerdas.