El sur de California sufre un nuevo terremoto de magnitud 7,1

  • El movimiento sísmico ha sido el más intenso de la serie de terremotos que afectan al estado de California desde el pasado jueves

  • El temblor ha causado importantes daños materiales pero no ha ocasionado víctimas mortales y tan solo ha dejado dos heridos leves

Un nuevo terremoto de magnitud 7,1 volvió a sacudir anoche el sur de California. El seísmo se produjo a las 8:20 de la noche (4:20 de la madrugada hora española) y forma parte de la misma serie de terremotos que llevan sacudiendo el estado de California desde el pasado jueves.

El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) ha localizado el epicentro del seísmo cerca de la ciudad de Ridgecrest al sur del Parque Nacional Death Valley, a unos 200 km al noreste de Los Ángeles y tras el temblor principal los sismógrafos han detectado al menos 16 réplicas de magnitud 4 o superior. La USGS advierte de que el riesgo no ha pasado y calcula que existe una posibilidad del 50% de que en las próximas horas el sur de California sufra otro terremoto de magnitud 6 o superior.

“La probabilidad de que haya otro (magnitud) cinco en la próxima semana es extremadamente alta”. Lucy Jones. Sismóloga de Caltech

Los sismólogos aseguran que la secuencia de temblores que arrancó el jueves 4 de julio con un terremoto de magnitud 6,4 no se va a detener, al menos de momento, y según la sismóloga del Instituto Tecnológico de California (Caltech) Lucy Jones “La probabilidad de que haya otro (magnitud) cinco en la próxima semana es extremadamente alta”. Según esta experta hay un 50% de probabilidades de que se produzca otro temblor por encima de magnitud 6 y un 11% de que vuelva a repetirse otro seísmo por encima de 7.

La escala que mide la intensidad de los terremotos no es aritmética sino logarítmica por lo que cada punto en la escala representa una intensidad 10 veces mayor que la anterior. Por eso, el terremoto registrado la pasada noche, según el USGS, ha sido 11 veces más potente que el del 4 de julio y ha venido, además, acompañado de cerca de dos decenas de fuertes réplicas.

Daños materiales pero sólo dos heridos leves

A pesar de la intensidad del temblor de la pasada noche no ha habido que lamentar víctimas y sólo dos personas han resultado heridas leves por la rotura de cristales. Sí que se han producido escenas de miedo y numerosas llamadas a emergencias. Dos casas han ardido por roturas en canalizaciones de gas que han causado incendios y el seísmo llegó a sentirse en la ciudad de Las Vegas. Allí llegó a interrumpirse el partido de baloncesto que jugaban a esa hora los Pelicans y Los Knicks en el Thomas & Mack Center cuando el marcador electrónico comenzó a temblar. El partido se interrumpió y los espectadores tuvieron que abandonar el recinto.

El seísmo de anoche dejó otras imágenes de nerviosismo como la de los presentadores de CBS en Los Ángeles que los sintieron y retransmitieron en directo.

El Servicio Geológico de los Estados Unidos ha activado la alerta roja por pérdidas económicas. Hasta el momento los temblores han causado destrozos por valor de más de 1.000 millones de dólares en el estado de California, y se esperan más terremotos y más daños. Lo que no se espera son víctimas mortales. Los expertos consideran que hay una muy baja probabilidad de que los temblores puedan causar muertes y mantienen en verde la alerta por pérdida de vidas humanas.

El terremoto de anoche ha sido el más intenso sufrido por el estado de California desde 1999 cuando otro temblor, también de magnitud 7,1, sacudió el Desierto de Mojave, cerca de la base de Marines de Twentynine Palms.