Prohibido decir Brexit en el Reino Unido

  • Los empleados del Ministerio de Asuntos Exteriores han recibido un manual de instrucciones con la terminología que deben usar tras la salida de la UE

  • Downing street elimina de su vocabulario palabras como "deal" (acuerdo) o "no deal"

Todo parecía una broma. Unos días antes de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, una fuente del Gobierno británico comentó en una reunión informativa con periodistas que "no se iba a pronunciar más la palabra Brexit". Ahora ha quedado probado que, este comentario hecho entre risas no era ninguna broma; es parte de una estrategia ordenada desde la oficina del Primer Ministro, Boris Johnson. Una de las pruebas es un documento enviado a empleados del Ministerio de Asuntos Exteriores al que ha tenido acceso el diario “The Guardian”.

Este curioso manual de instrucciones arranca así: “El Brexit se ha completado. Por ello no use este término. Eso se reserva a un evento histórico que tuvo lugar el 31 de enero de 2020”. Y a continuación aconseja que se utilice “periodo de transición” y no “periodo de implementación” para describir la situación en la que se encuentra el país.

Esta semana durante el discurso sobre la futura relación comercial con la UE, Boris Johnson no pronunció ni una sola vez la palabra Brexit. Cuando fue preguntado por un periodista si había prohibido este término, el líder conservador lo negó. Y a continuación dijo: “Eso se ha acabado. Ya ha ocurrido… No voy a decir que es como el Big Ban o la conquista normanda, pero se está desvaneciendo detrás de nosotros”.

Deal y no deal

Deal y Deal no deal Otras de las palabras que no quieren que se empleen más es deal (acuerdo) y dealno deal “Ya tenemos un acuerdo”, asegura un portavoz de Downing Street. El acuerdo de salida que alcanzaron Londres y Bruselas y que fue aprobado por los parlamentos británico y europeo. Y es que ese término ha sido de los más pronunciados y destacados en titulares desde el referéndum del Brexit de junio de 2016 y trae a la memoria un capítulo gris, tumultuoso y cansino para los ciudadanos, al que el Primer Ministro quiere dar carpetazo.

“El 31 de diciembre de 2020 dejaremos el periodo de transición con un acuerdo de libre comercio al estilo del de Canadá o con el acuerdo de 2019 que dará vía a una relación comercial con la Unión Europea como la de Australia”, explica este documento, en el que se insiste en que no parezca que "estamos buscando un acuerdo (agreement) único o novel. Perseguimos uno basado en un precedente de la UE”.

A los diplomáticos les urgen que digan que la “prioridad de las negociaciones es asegurar que el 1 de enero de 2021 se restaura “nuestra independencia económica y política”. Parte de las instrucciones contemplan que se usen términos como “ambicioso” y que cuando se hable de la futura relación con Europa se emplee la frase: “Amistosa cooperación entre soberanos iguales”.

Polémico telegrama

Otro documento ha puesto de manifiesto la estrategia del Gobierno británico. En un telegrama enviado por el Ministro de Asuntos Exteriores, Dominic Raab, a los embajadores del país en todo el mundo les pide que en las cumbres internacionales “se sienten separados de sus homólogos de la UE”.

Además, les insta a “adoptar una actitud de país independiente y seguro de sí mismo”. Y añade consejos como: “No nos pueden impedir hablar o “no debemos ser tímidos si el Reino Unido decide “no aplicar posiciones de la política exterior de la UE” durante este periodo de transición.