{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Este verano de 2022, que comenzó el pasado 21 de junio y durará 93 días y 16 horas, está registrando un clima más fresco que en semanas pasadas, cuando una ola de calor propició temperaturas récord en España.
Con la llegada de julio y las ansiadas vacaciones de verano para una buena parte de la población, muchos se preguntan si hará bueno durante el periodo estival, con el objetivo de disfrutar de los días de descanso.
El joven aficionado a la meteorología Jorge Rey, quien se hizo famoso en plena pandemia de covid por predecir la llegada de la borrasca Filomena, ha pronosticado qué tiempo nos espera en los meses de julio y agosto. Y lo ha hecho de nuevo con el método de las cabañuelas, es decir, observando la naturaleza.
Las altas temperaturas del mes de junio dieron paso a días más frescos en el comienzo del verano con valores más bajos de lo normal para esta época, llegando incluso a helar en el norte peninsular.
Sin embargo, con el arranque de julio, parece que las temperaturas comienzan a estabilizarse y Jorge Rey advierte de que la semana que viene tendremos "temperaturas de verano". Además, predice que estos meses serán "húmedos y cálidos".
"Este verano estará marcado por temperaturas de calor, por lo general, que provocarán tormentas fuertes", prevé el joven, por lo que aconseja "cosechar lo antes posible".
El calor intenso ha reaparecido este primer fin de semana de julio en nuestro país, alcanzándose o superando los 35 grados en la mitad sur, la meseta norte, el valle del Ebro y Baleares. "Lo podemos considerar plenamente veraniego, con temperaturas en ascenso en la mayor parte del país, tanto de los valores diurnos como nocturnos", según indicó Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
La predicción de la Aemet vaticina que más de una veintena de capitales de provincia tendrán como mínimo 35 grados este fin de semana. Badajoz y Toledo podrían ser las más calurosas, acercándose a los 40 grados.
El domingo habrá un descenso acusado en los termómetros en el Cantábrico y una bajada ligera en el resto de la península salvo en las comunidades mediterráneas, donde las temperaturas aumentarán.
De nuevo, los termómetros marcarán entre 34 y 36 grados en las horas centrales del día y primeras horas de la tarde en amplias zonas del nordeste, la meseta norte, la zona centro y la mitad sur. Esas temperaturas altas se extienden este domingo al interior de las regiones bañadas por el Mediterráneo y al archipiélago balear.