Los vecinos afectados por el incendio de Alicante: "Estamos viendo como nuestro pueblo se convierte en un cenicero"

El incendio de Alicante es uno de los más voraces de las últimas horas. El incendio de Vall d'Ebo sigue descontrolado y miles de personas han tenido que ser desalojadas de sus casas. El humo se ve desde Mallorca. La carretera CV-712 ha sido cortada por la proximidad de las llamas. Paralelamente, los bomberos luchan contra otro incendio en la Comunidad Valenciana, este en Bejís, Castellón.

El incendio de Alicantes es el peor incendio en una década en esta provincia. Las llamas han calcinado casi 10.000 hectáreas y hay casi 2.000 personas desalojadas de 10 municipios, las últimas los vecinos de Margarida.

La imagen del incendio es infernal. Declarado en Marina Alta de Alicante el pasado sábado, sigue activo en varios frentes y a lo largo de 65 kilómetros. La carretera que va hacia Pego, la CV-712, se ha cerrado al tráfico por la cercanía de las llamas.

Un rayo causante del incendio de Alicante

El presidente de la Comunidad, Ximo Puig, daba ayer domingo cuenta del origen de este pavoroso incendio. "Un rayo lo ha producido. Son miles y miles de rayos los que han caído en la Comunidad Valenciana y en esta zonas en estos días".

“Lo más importante es que no haya desgracias personales, eso es lo fundamental" ha dicho Ximo Puig.

Los vecinos lloran las pérdidas. "Son árboles de más de cien años de historia que se van a perder todo", señala un joven vecino. Es el trabajo de varias generaciones, de "mi abuelo, mi padre, ahora yo trabajándolo para nada".

Los trabajos de los bomberos se vuelcan en evitar que el fuego devore las casas. "Estamos viendo como nuestro pueblo se convierte en un cenicero", dice otro vecino.

Más medios para extinguir las llamas de Alicante

El Gobierno central enviará más medios para atajar el avance de las llamas, pero hasta ahora el inmenso humo ha dificultado las tareas desde el aire. El humo del incendio de Alicante se ha visto en las últimas horas desde la isla de Mallorca.

El fuego sigue sin control tras una noche en la que 300 efectivos no han descansado ni un minuto. A primera hora de este martes se han incorporado 26 medios aéreos .