Los vecinos de Granada, aterrados ante la sucesión de temblores: "Tenemos auténtico pánico"

La tierra tiembla en Granada. En Santa Fe, donde muchos vecinos han vuelto a pasar la noche en espacios públicos abiertos por miedo a los seísmos, se ha situado el epicentro de un terremoto de magnitud 3,3 a las 8,11 horas del viernes y el jueves por la noche se registraron un total de cuatro, que llegaron tras uno de 4,4. Todo este enjambre sísmico mantiene aterrada a la población, pero los expertos insisten en tranquilizarles, asegurando que los temblores pueden alargarse durante meses.

"Tenemos pánico, auténtico pánico", expresa Julio López, dueño de una tienda de electrónica. Como él, muchos otros vecinos temen los temblores que se están produciendo y que mantienen a muchos de ellos durmiento en la calle.

Solamente en la noche del jueves al viernes hubo 750 movimientos de tierra. Pero los expertos insisten en que es una situación normal. "Solo 23 son de magnitud superior a 3 y 5 son de magnitud superior a 4, lo cual no es tan alarmante, pero yo entiendo que como han sido tan seguidos en el tiempo la gente está preocupada", expresa Mercedes Ceviche, del Instituto Andaluz de Geofísica, que insiste en que no es anormal y va a seguir ocurriendo durante "semanas, meses…".

En los colegios, los niños aprenden como si fuese un juego a protegerse de los terremotos: es mas seguro refugiarse bajo una mesa o una cama, que salir de casa. Pero, cuando el pánico acecha, es difícil mantener la calma. Ejemplo de ello es cómo vivieron en Vegas del Genil el temblor más fuerte de las últimas horas, que ocurrió en el momento en el que se celebraba un pleno telemático del Ayuntamiento.

Emergencias 112 Andalucía ha coordinado ya 962 avisos relacionados con los temblores que se están registrando en la provincia de Granada desde el pasado sábado 23 de enero y ha coordinado en total 231 incidencias, de las que en 96 se han constatado daños no estructurales, principalmente por caídas de elementos, desprendimientos y grietas en viviendas.

Desde las 18.00 horas del jueves se han registrado en la zona más de un centenar de terremotos de baja intensidad y hasta ocho de intensidad superior a 3, el mayor de ellos de 4.2 con epicentro en Santa Fe. A primera hora de la mañana de este viernes se ha vuelto a producir un nuevo temblor de 3.3 en Santa Fe a las 8,11 horas. A las 4,46 y a las 5,00 horas de esta madrugada volvieron a notificarse otros dos sismos de magnitud 3.0 en Atarfe.

La Junta de Andalucía mantiene operativo las 24 horas el grupo de seguimiento de movimientos sísmicos que lleva a cabo un análisis permanente de la actividad sísmica en la zona. Ayer tarde y durante la noche se reforzaron de nuevo los centros regionales del 112 y los provinciales que actúan como soporte. Asimismo, desde el pasado martes 26 está activado en fase de pre-emergencia el Plan de Emergencia ante el Riesgo Sísmico en la provincia de Granada.

Según el último informe de evaluación del Instituto Geográfico Nacional, se han calculado un total de 585 terremotos en la zona desde el inicio de este episodio sísmico, de los que 15 han sido de magnitud mayor o igual que 3,0 y 61 han sido sentidos por la población.

La sismicidad registrada es habitual en esta zona, que se enmarca dentro del sector central de las cordilleras Béticas, una de las regiones con mayor actividad sísmica de la Península Ibérica, fruto de la convergencia entre la placa Africana y Euroasiática una velocidad de unos 4-5 milímetros al año.

En la provincia de Granada han ocurrido importantes terremotos a lo largo de la historia, siendo la cuenca de Granada la más activa sísmicamente. El más antiguo del que se tiene constancia ocurrió en 1431 al sur de Granada que tuvo una intensidad macrosísmica de VIII-IX produciendo grandes daños en la Alhambra y el más virulento el de 1884 en Arenas del Rey, que alcanzó una intensidad de IX-X produciendo 839 víctimas mortales.

También destacan los terremotos de 1531 en la cuenca de Baza con intensidad VIII-IX y el de 1804 en la cuenca de Dalías con intensidad VIII-IX, que produjo gran destrucción en Dalias, Berja y Roquetas y 407 víctimas.