Bernardo Montoya, el hombre que asesinó a Laura Luelmo y abandonó su cuerpo aún con vida en un paraje de Huelva
Bernardo Montoya fue condenado en 2022 a prisión permanente revisable por el asesinato de Laura Luelmo
El 12 de diciembre de 2018 Bernardo Montoya secuestró, agredió sexualmente y mató a Laura Luelmo, una profesora que trabajaba en Huelva
HuelvaLa desaparición y el brutal crimen de Laura Luelmo, la joven profesora asesinada en diciembre de 2018 en El Campillo (Huelva), fue un caso que conmocionó a la sociedad española y evidenció la violencia estructural que sufren muchas mujeres en su día a día. La desaparición de Laura Luelmo se produjo sobre las 17,30 horas del día 12 de diciembre de 2018, cuando la joven regresaba de hacer la compra en un supermercado y fue abordada por Bernardo Montoya, que vivía frente a ella en una vivienda de la localidad de El Campillo.
La joven estaba recién llegada a la localidad onubense para impartir clases en el instituto del vecino municipio de Nerva. Al no tener noticias de ella, la familia de Laura Luelmo interpuso una denuncia y se activó el correspondiente dispositivo de búsqueda para dar con su paradero, siendo encontrada sin vida el día 17 de diciembre de ese año. Fue un voluntario que participaba en las labores el que halló prendas de mujer en la zona de Las Mimbreras y la Guardia Civil encontró el cuerpo a unos 200 metros del lugar del hallazgo de las prendas, semioculto en una zona de terraplén y matorrales. Tan solo un día después, Bernardo Montoya fue detenido y terminó confesando el crimen a los investigadores, aunque posteriormente cambiaría su versión de los hechos.
El asesinato de Laura Luelmo
Según recogen las investigaciones y la sentencia del caso, el 12 de diciembre de 2018 Bernardo Montoya introdujo a la fuerza en su domicilio a Laura Luelmo con intención de agredirla sexualmente, de modo que, una vez dentro de la casa, el condenado cerró la puerta, impidiendo que la víctima saliera de la vivienda y que se le prestase auxilio, comenzando en ese momento a propinarle "fuertes" golpes.
Estos golpes se produjeron mediante puñetazos y utilizando para ello además un objeto contundente, de tipo romo, según prosigue la sentencia, que añade que, "aprovechando el aturdimiento e indefensión" de la joven, el acusado "le ató las manos a la espalda y le tapó la boca con cinta adhesiva", trasladándola a uno de los dormitorios del inmueble, "donde la agredió sexualmente".
Seguidamente, "con ánimo de acabar con la vida" de la víctima y "para evitar que se conociera la comisión de los hechos", el acusado le asestó un "fuerte" golpe con un objeto contundente, tras lo que, sobre las 18,42 horas, y "encontrándose aún con vida", el condenado la envolvió en una manta y la introdujo en el maletero de su coche, donde también introdujo un bolso con el teléfono móvil y otros objetos personales de la mujer.
Se deshizo del cuerpo aún con vida de Laura abandonándolo en un paraje
Una vez en el vehículo, Bernardo Montoya realizó un recorrido por los términos municipales de Minas de Riotinto, Nerva y El Campillo, dirigiéndose finalmente a un concreto paraje donde, entre las 19,44 y las 20,42 horas, dejó el cuerpo de la fallecida así como el resto de los objetos, con la excepción del teléfono móvil, en una zona escarpada y de difícil acceso, todo ello con intención de que su cuerpo no fuera hallado y sin comunicar el paradero del mismo hasta su detención.
La joven falleció aproximadamente a las 20,15 horas del día 13 de diciembre de 2018, siendo hallado su cuerpo el día 17 de diciembre de ese año en el mismo lugar donde fue dejado por el acusado.
Los antecedentes de Bernardo Montoya
Por su parte, Montoya fue detenido el 18 de diciembre de 2018, apenas un día después del hallazgo del cuerpo de la profesora en la zona conocida como Las Mimbreras a las afueras de El Campillo.
Bernardo Montoya, con graves antecedentes penales como el asesinato de una anciana, confesó el crimen en el interrogatorio policial en un primer momento, pero posteriormente cambió su declaración y desde el 4 de abril de 2019 ha mantenido la versión de que fue su exnovia la presunta responsable de la muerte de la chica. No obstante, hay que recordar que Montoya ha sido el único acusado en esta causa.
Bernardo Montoya, condenado a la pena de prisión permanente revisable
La Audiencia Provincial de Huelva ratificaba en 2022 la firmeza de la sentencia dictada por la misma en diciembre de 2021 en la que se condenaba a Bernardo Montoya a la pena de prisión permanente revisable tras el veredicto emitido por un jurado popular, que lo consideraba culpable de agredir sexualmente y asesinar a la profesora zamorana de 26 años. La confirmación de la sentencia se daba después de que la misma no hubiese sido recurrida por ninguna de las partes.
Además de la prisión permanente revisable, la sentencia le imponía 17 años y medio de cárcel por un delito de detención ilegal en concurso ideal con el delito de agresión sexual con la agravante de género, así como en concepto de responsabilidad civil, el acusado tendrá que indemnizar con un total de 400.000 euros a los padres y hermanos de la víctima.
El asesinato de esta profesora conmocionó al país ya que fueron masivas las concentraciones de repulsa y las carreras que se convocaron en recuerdo de la joven, que iba con ropa deportiva en el momento de su desaparición el 12 de diciembre de 2018.