'Buenos días', la campaña que fomenta la convivencia en un pueblo de Barcelona: "Saludar es reconocer al otro"

BarcelonaLos 'buenos días' se ha convertido en un acto de cortesía para "romper barreras" en Manlleu, donde saludar fomenta la convivencia gracias a la campaña municipal impulsada por dos vecinas de la localidad barcelonesa.

"Saludar es reconocer que el otro existe. Lo haces visible", explica Scarlet, una de las artífices de la iniciativa que descubrió la importancia de saludar al llegar a Manlleu cinco años atrás, procedente de Perú.

"En mi país, si no me respondían, me daba igual, Pero aquí, al llevar a la escuela a mi hijo, sí que me afectaba. No me había pasado antes", reconoce Scarlet, quien no dudó en pensar algún tipo de solución para promover entre los habitantes el simple gesto de decir 'buenos días'.

En su caso, no recibir de vuelta un saludo le ha hecho sentirse mal en alguna ocasión. "No lo hacemos porque seamos maleducados. Hay instantes en el día que no nos sentimos bien, pero cuando te responden estás mejor. Incluso algunas no lo hacen por vergüenza".

Tanto ella como Camelia, una mujer que llegó de Rumania en 2006, crearon una campaña para "romper barreras" entre los vecinos. La iniciativa caló en el consistorio y decidió llevarla a cabo el pasado mes de marzo de 2023. De este modo, los 'buenos días' también están marcados en los carteles de muchas tiendas, publicaciones en redes sociales y puntos de libro.

"Es un tema de voluntad. Desde que me he implicado, me siento más del pueblo que antes", añade Camelia, a quien un saludo le alegra el día y permite reconocer a otras personas con las que se cruzan a diario. "A veces no saludas porque no te han presentado formalmente con esa persona".

La campaña unifica a la ciudadanía y también pretende que los más jóvenes no pierdan unos modales que cada vez más está en desuso. "Recuperar este hábito sirve para romper el hielo con tu vecino, ganar esa empatía y mejora la convivencia", destaca el alcalde de Manlleu, Arnau Rovira. "Es educación".

Algunos de los más beneficiados de la campaña son los comerciantes, que ven pasar a clientes por sus tiendas sin dirigirles la palabra. "Siempre lo decimos: 'buenos días' lo primero de todo. Muchos van con el móvil y ni te contestan", lamenta Mercè Pujol, que trabaja en una peluquería.

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