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La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha confirmado que la primera ola de calor del verano está en marcha. Llevamos varios días con dificultad para dormir con más de 22ºC y las tardes se tornan infernales a más de 38ºC, excepto en el norte. Por allí notarán que las temperaturas se disparan a partir del jueves, y de hecho algunas de las zonas que peor lo van a pasar son las que hasta ahora eran un ‘refugio’ del calor. Sin ir más lejos, hay aviso rojo en el País Vasco por riesgo extremo.
Aunque julio está siendo bastante tórrido, no ha sido hasta esta semana cuando hemos visto que se declaraba la primera ola de calor del año. Las condiciones se cumplen: será intensa, extensa y duradera, como confirmó el martes Rubén del Campo, portavoz de la Aemet.
Los avisos por calor van en función de la anomalía, no tanto de la temperatura en sí. No es de extrañar, por tanto, que tengamos un aviso rojo por riesgo extremo en Vizcaya. La máxima podrá sobrepasar tanto allí como en el resto del País Vasco los 40ºC, una marca que queda entre 10 y 15ºC por encima del promedio de la fecha, que sería de apenas 30ºC en circunstancias normales.
Sorprende también que la Comunidad Foral de Navarra en su totalidad esté en aviso naranja el jueves, cosa rara, aunque no es de extrañar teniendo en cuenta la holgada anomalía prevista. Se prevé que se superen también allí los 40ºC, especialmente en el sur, aunque no se quedarán muy atrás en zonas muy próximas a los Pirineos. Estas, y el resto de regiones que vemos en naranja en el mapa de avisos, tendrán que extremar la precaución en las horas centrales del día.
Hay que destacar además el hecho de que en el norte el calor llega de golpe. De un día para otro pasarán de no llegar a los 30ºC por la tarde a rebasar los 40ºC. En el sur y el centro llevamos ya más días de ‘entrenamiento’, haciéndonos al calor extremo. El jueves será tórrido en todo el valle del Ebro y La Rioja, en los valles del sur (con 41ºC en el Tajo y Guadiana, y 42ºC en el Guadalquivir) y en el interior de Mallorca, pero en prácticamente toda la Península está garantizado que nos quedaremos entre los 34 y los 40ºC.
Serán tremendamente afortunadas algunas zonas costeras sobre todo de Galicia, pero sobre todo la suerte acompañará a las Islas Canarias. El archipiélago quedará al margen de la ola de calor y probablemente no llegue a los 33ºC de máxima en su mayoría. Aunque cuando más envidiaremos a las islas será por la noche. El mapa de previsión de temperaturas mínimas es el siguiente:
Eso sí, como resultado del calor, se crearán nubes de evolución durante la mañana en algunos puntos que podrán dar lugar a tormentas puntuales y aisladas por la tarde. Serán sobre todo eléctricas y con viento, aunque puede caer algo de precipitación. Serán, como decimos, fenómenos muy aislados, más probales en el sur de Aragón, en áreas de Castilla y León, en Asturias, Cantabria, la serranía de Guadalajara, localidades de Álava y la sierra de Madrid. La Aemet ve mayor riesgo por estas tormentas entre las 13 y las 21 horas.