Denuncian la situación de los mayores de una residencia de Santiago, asfixiados a más de 30 grados sin aire acondicionado: "Es un invernadero"
Algunos familiares han llevado ventiladores
La Xunta asegura que está redactando un proyecto, aunque el sistema de climatización lleva tres años estropeado
Santiago“La cuarta planta es psicogeriatría y con estas temperaturas es un horno y los mayores se desnudan”, denuncia Loli Fernández, presidenta del comité de empresa USO. El aire caliente tiende a subir, pero en la residencia DomusVi Fundación José Otero-Carmela Martínez, en Santiago, ninguno de los 150 residentes se salva de unas temperaturas que superan los 30 grados. Según ha denunciado el sindicato USO, en algunas estancias se han alcanzado los 32º, sin que el centro cuente con un sistema de ventilación o aire acondicionado adecuado.
“El edificio es de cristal y chapa y eso convierte a la residencia en un invernadero”, explica Loli. “Donde mejor se puede estar es la planta cero, y ahí bajamos a los de la planta uno", añade. "Disponemos de un protocolo específico para mitigar los efectos del calor, tanto para los profesionales como para las personas mayores a las que cuidamos, con medidas organizativas y ambientales adaptadas", detallan desde la compañía DomusVi.
Pero no siempre es posible trasladar a los ancianos. "Conforme vas subiendo, también sube la temperatura. En la tercera están encamados y algunos familiares han llevado ventiladores”, explica la presidenta del comité de empresa USO.
La situación, advierten desde USO, vulnera la normativa de prevención de riesgos laborales, que establece que en trabajos sedentarios —como el cuidado de personas mayores— la temperatura debe oscilar entre los 23 y los 26 grados, con un máximo de 27.
Por las noches destapan a los residentes para que puedan dormir
“A nosotras la residencia nos ha puesto ventiladores en nuestras salas, pero de poco nos sirve porque durante nuestra jornada estamos atendiendo a los residentes. Por las noches, por ejemplo, nos dedicamos a destaparles para que puedan dormir”, continúa Loli.
Una medida provisional de la compañía a la espera de que la Xunta arregle el sistema de climatización. "En situaciones puntuales de calor extremo, activamos medidas de contingencia inmediatas, como la incorporación de dispositivos adicionales de refrigeración y la supervisión periódica de la temperatura por parte de nuestros profesionales, con el fin de garantizar condiciones adecuadas en el entorno laboral", explican desde DomusVi.
USO recuerda que, debido al cambio climático, el 71% de los trabajadores están expuestos al calor como riesgo laboral, por lo que exigen protocolos preventivos adecuados. Y advierten que ese calor extremo en trabajos al aire libre o en entornos con climatización insuficiente, como es el caso de esta residencia, no se considera riesgo “natural” sino “laboral” por lo que exigen medidas “urgentes”. Con estas condiciones, Loli contesta que “no se puede trabajar”.
El sistema de climatización lleva tres años estropeado
Desde la Xunta de Galicia aseguran que están redactando un proyecto para renovar el sistema de climatización de este centro concertado. Aunque según cuenta Loli, el sistema se estropeó hace ya tres años. Mientras tanto, la administración ha anunciado que instalará de forma provisional aparatos de adaptación térmica y control de humedad para paliar los efectos del calor. Loli es tajante: “deben hacer algo porque con el cambio climático esto va a ir a peor”.
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