El polémico gesto del decano a uno de los cardenales favoritos justo antes del cónclave

A las 10:00 horas de este miércoles 7 de mayo se ha celebrado la misa 'Pro Eligendo Pontifice', en la que se ha invitado a los 133 cardenales electores menores de 80 años a dirigirse por la tarde a la Capilla Sixtina, donde comienza oficialmente el cónclave, momento en el que, con derecho a voto, se cierran las puertas e inicia el aislamiento, tal y como se observa en el vídeo.

Mientras tanto, se espera que la primera fumata negra -con la que se indica que todavía no se ha escogido al sucesor del papa Francisco- se vea en torno a las 18:00-19:00 horas. Sin embargo, ya hay candidatos favoritos a convertirse en el 267º pontífice de la historia. Uno de ellos, y el más sonado, es Pietro Parolin.

El italiano de 70 años es quien más papeletas tendría de salir vencedor. Así se conoció prácticamente desde que falleció Francisco el pasado 21 de abril, y se ha mantenido a la cabeza desde entonces. Una visión que no solo radica en muchos fieles de la Iglesia Católica, también dentro del Vaticano. Una preferencia que ha quedado reflejada este miércoles durante la misa, cuando el decano ha protagonizado un polémico gesto justo antes del cónclave.

Al terminar la ceremonia, el decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re -que no ha mencionado a Francisco, un detalle que ha sido interpretado por algunos como una señal de su deseo de no continuar con su legado- ha tenido un gesto cargado de significado y fuera de protocolo.

El que fue encargado de presidir la santa misa por el funeral del pontífice y su homilía ha abrazado a Pietro Parolin, candidato de consenso, mientras le ha susurrado al oído: "Auguri eh e doppi", lo que se traduce como: "Buena suerte, por partida doble".

Qué hay detrás de este gesto

Quien no conoce el contexto podría interpretarlo como un simple mensaje de ánimo, pero estas palabras van mucho más allá. En el Vaticano, algunos sectores no han dudado en criticar al difunto papa por su forma de pensar, sus doctrinas y normas, mientras que otros defienden la necesidad de que su sucesor continúe su legado.

En el caso de Parolin, pese a ser prácticamente la mano derecha de Francisco, mantiene un perfil más moderado y ha sido clave en acuerdos internacionales. También es visto como una figura más moderada y pragmática y evita declaraciones incendiarias, como las que podrían haber sido para algunos miembros de la Santa Sede las que pronunció el argentino sobre la homosexualidad, el feminismo o el aborto, causas con las que normalmente la Iglesia no ha estado de acuerdo.

En el caso del decano Re, que no entrará en la Capilla Sixtina como electo ya que supera los 80 años, su papel ha sido clave desde que el pontífice italiano perdió la vida, y su gesto podría ser traducido como su deseo personal de que sea Parolin quien sustituya a Francisco. Cabe resaltar que durante la homilía ha recordado que "se debe abandonar cualquier consideración personal" a la hora de escoger al nuevo papa, ya que solo hay que tener "en la mente y en el corazón al Dios de Jesucristo y el bien de la Iglesia y de la humanidad".

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