Crimen de Isaac: investigan a un cuarto menor que pudo haber participado en el asesinato del rapero
Investigan a un cuarto menor que pudo haber participado en el asesinato de Isaac
El patinete que usaron el resto de acusados fue alquilado con sus datos
Se continúa estudiando si fue un ajuste de cuentas entre bandas latinas
La investigación por el asesinato del rapero Isaac el pasado verano en Madrid continúa. La Fiscalía de Menores ha tomado declaración como investigado a un cuarto menor, con cuyos datos se alquiló un patinete que presuntamente usaron el resto de imputados inicialmente.
Según han informado fuentes jurídicas, el patinete se alquiló poco antes del asesinato. Se ha comprobado, además, que el investigado mantuvo conversaciones con los cuatro detenidos, acusados como autores de los hechos, de manera que él podría ser encubridor.
Isaac tenía síndrome de Asperger
Los cuatro presuntos autores de la agresión mortal son un joven de 18 años, apodado Bárcenas, que se confesó autor del asesinato y de inmediato ingresó en prisión, junto a él, dos menores de 16 y 17 años para los que la Fiscalía decretó el internamiento en régimen cerrado en el centro Teresa de Calcuta durante tres meses, prorrogables otros tres.
Además este viernes se ha celebrado en los juzgados la vistilla prevista en la Ley del Jurado para concretar la imputación del mayor de edad, en la que la Fiscalía y la acusación particular, ejercida por el letrado Juan Manuel Medina, han solicitado que se le atribuya un delito de asesinato con alevosía y de pertenencia a organización criminal.
La acusación popular, ejercida por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), ha solicitado además que se le impute un delito de odio. Isaac tenía síndrome de Asperger y tenía reconocida una discapacidad.
Le asesinaron con cuatro puñaladas por la espalda
El crimen de Isaac tuvo lugar el pasado 14 de julio, cuando el rapero apodado 'Little Kinki' fue perseguido por un grupo de al menos tres personas, que le alcanzaron y le asestaron cuatro puñaladas en la espalda en el túnel de la calle del Comercio, que une los distritos de Retiro y Arganzuela de Madrid.
Según fuentes de la investigación, el joven había mantenido contacto con diversas bandas latinas, y pudo ser su negativa a unirse a alguna de ellas lo que generó un conflicto que acabó con su vida.
