Dar la mano, un riesgo frente al coronavirus: desde recibir la paz en la iglesia hasta pedir un autógrafo

Las medidas básicas para prevenir contagiarse por coronavirus son claras: mantener una constante higiene de manos en todo momento, desinfectar zonas de uso común en espacios públicos y evitar lugares con gran afluencia de personas. Así lo recomienda la Organización Mundial de la Salud y así se ponen en jaque a las ceremonias de la iglesia católica.

Muchos de los rituales que se llevan a cabo en sus celebraciones pasan por que sus fieles se estrechen la mano o se santigüen con el agua bendita de la pila. Lo que se convierten en un gran foco de infección de coronavirus, la enfermedad respiratoria que se ha cobrado la vida de 2 000 personas y ha contagiado a más de 100 000 en todo el mundo.

Varios obispados, como el de Vitoria o Málaga, han tomado medidas preventivas que pasan por evitar que sus fieles se den la paz o cambiar la manera habitual de dar la comunión, en vez en la boca, se dará en la mano. También vaciar las pilas de agua bendita.

Unas medidas de prevención que también han tomado en El Vaticano, regulando el acceso de personas para evitar grandes conglomeraciones. Fue el caso de la celebración del Ángelus, el pasado domingo, a las que solo pudieron asistir a escuchar al Papa un centenar de personas. Además, repartieron mascarillas y guantes entre los presentes.

El director del Centro de Coordinación de Emergencias, Fernando Simón, también apuntó directamente a la Iglesia, en este caso evangélica, por el contacto que tienen sus feligreses en las celebraciones religiosas. "Una situación de interés se da en un grupo religioso de Torrejón, donde se han registrado varios casos y se investiga si puede tener relación con otro grupo. Es una investigación difícil que los trabajadores de salud pública están llevando a cabo", manifestó Simón al tratar de aclarar el origen del foco de infección que hay en Torrejóz de Ardoz, una de las poblaciones más afectadas de España.

El contacto humano se reduce al tiempo que aumenta el coronavirus. Cada vez hay más psicosis entre la población mundial y estrechar las manos se ha convertido en un gran riesgo que pocos están dispuestos a asumir.

La propia canciller alemana, Angela Merkel, ha sido 'víctima' de ese rechazo cuando el Ministro de Interior alemán, Horst Seehofer, se negó a estrecharle la mano debido a la inminente amenaza del coronavirus.

Merkel no pudo contener su cara de asombro, pero se lo tomó a risa y aseguró que "era lo correcto". Alemania es uno de los países europeos más afectados por la epidemia, registrando 130 casos de contagio, aunque, por el momento, no han tenido que lamentar ninguna muerte.

En China, foco originario del coronavirus, han encontrado la manera de evitar nuevos contagios al saludarse. Han decidido cambiar la tradicional forma de estrecharse la mano por una muy particular: chocar los pies.

Una original fórmula que, pese a lo pintoresca que podría llegar a parecer, ayudará sin duda, a evitar el contacto directo con otras personas.

La liga de baloncesto más importante del mundo también ha tomado precauciones frente al coronavirus. La NBA ha instado a sus jugadores a que no se estrechen la mano, ni entre ellos y con los aficionados, ni que firmen autógrafos.

Han limitado también los entrenamientos fuera de los Estados Unidos, pensado incluso en cancelar algunos, debido al incremento del virus a nivel mundial.

Ante la gran epidemia que supone el coronavirus, la Organización Mundial de la Salud ha decidido publicar una serie de recomendaciones, al margen de bulos y fakes, para que la población se alerte, pero no se alarme.

Lo esencial es mantener una constante higiene de manos, evitar lugares públicos con gran afluencia y no realizar viajes si se tiene tos o fiebre.

Así mismo es muy importante tener precaución al toser o estornudar y hacerlo siempre en la manga o usando un pañuelo de papel y desecharlo inmediatamente en un contenedor de basura cerrado. Nunca poner las manos delante de la boca o la nariz.

La OMS pide máxima precaución para los mayores de 60 años, pues son la población más vulnerable ante el coronavirus y la que mayor número de muertes ha registrado hasta el momento. Italia, mayor foco del virus en España, con 1 700 infectados y más de 50 muertos, ha pedido a los más mayores que no salgan de casa.

Y es que todas las medidas son pocas con tal de evitar que la epidemia del coronavirus siga aumentando y llegue a convertirse en una pandemia.