Razones por las que podrías ser un consumidor vulnerable y cómo reclamar tus derechos con la ley en la mano
Si tu hogar cumple cualquiera de los criterios, tienes derecho a un descuento substancial y protección ante cortes
Bono social en 2025: mitos y verdades, cómo solicitarlo y qué debes tener en cuenta para no perderlo
En plena crisis energética, el bono social representa una red de seguridad para hogares que pasen por dificultades. Saber si puedes acceder a esta ayuda, y cómo reclamarla si te la niegan, puede marcar la diferencia entre asumir el coste completo de tu factura o mantener un aporte reducido y protegido. Aquí te explicamos, con base legal y administrativa, por qué podrías ser considerado consumidor vulnerable, y cómo hacer valer tus derechos.
Lo primero que se debe tener en cuenta es que la condición de consumidor vulnerable está definida por el Real Decreto 897/2017, que estipula umbrales de renta en función del número de integrantes de la unidad de convivencia (vínculos matrimoniales, consanguíneos hasta segundo grado, adopción o acogimiento). Esencialmente, si la renta anual de tu hogar no supera 1,5 veces el IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples) que, por ejemplo, es de 12.600€ anuales para una persona, entrarías en esta categoría, y los umbrales sepueden ampliar si hay circunstancias especiales.
En este mismo Real Decreto se establece una categoría con mayor protección: el consumidor vulnerable severo, que se aplica a aquellos hogares con rentas inferiores al 50% de los umbrales anteriores. Por ejemplo, un hogar unipersonal con ingresos inferiores a 6.300€ anuales ya entra en esa categoría. Incluso se contempla que una familia numerosa quede dentro de esta categoría aunque cuente con ingresos mayores, siempre que no superen límites específicos.
Finalmente, la protección máxima la obtienen quienes, además de cumplir los criterios de vulnerable severo, están siendo atendidos por servicios sociales que cubren al menos el 50% de la factura. En ese caso, la normativa impide que se les corte el suministro eléctrico bajo ninguna circunstancia.
El bono social puede protegerte
Si cumples alguna de estas condiciones, puedes aprovecharte e los beneficios del bono social eléctrico, que aplica descuentos sobre la tarifa regulada PVPC, y son del 35% para vulnerables y 50% para vulnerables severos. No obstante, de forma excepcional en 2025, los descuentos serán entre el 1 enero y el 30 junio del 50% para vulnerables y del 65% para severos. Del 1 julio al 31 diciembre los descuentos serán del 42,5% y 57,5%, respectivamente.
Además, hasta el 31 de diciembre de 2025, se mantiene la protección frente al corte de suministros básicos (luz, gas, agua) para todos los beneficiarios.
¿Cómo solicitarlo y defenderte si te lo niegan?
Para solicitar el bono social, debes acudir a tu comercializadora de referencia (COR), adjuntar solicitud y documentación: identificación del titular, certificados de renta o beneficios (por ejemplo, Ingreso Mínimo Vital, familia numerosa), justificantes de servicios sociales en riesgo de exclusión, certificado de empadronamiento, CUPS y potencia contratada ≤ 10 kW. La empresa tendrá 10 días hábiles para resolver, y si te lo deniegan injustamente, puedes presentar una reclamación a los servicios de consumo correspondientes.
El bono social tiene una duración de dos años y suele renovarse automáticamente si continúan las condiciones. Las familias numerosas lo mantienen mientras sea vigente su título, sin necesidad de solicitar renovación).
Ser considerado consumidor vulnerable no es un estigma, sino una vía legal de alivio ante la creciente factura energética. Si tu hogar cumple cualquiera de los criterios: renta limitada, pensionista con prestación mínima, familia numerosa, perceptores del IMV, o asistencia social, tienes derecho a un descuento substancial y protección ante cortes. No dejes pasar esos derechos: si te lo niegan, puedes reclamar con respaldo normativo. Conocer la ley es el primer paso para exigirla.