El efecto mariposa del caso de Sandra Peña: un 'me too' del acoso escolar por el que se multiplican las denuncias

Diana Díaz, directora de líneas de Ayuda ANAR: "Hemos tenido un repunte, un aumento de llamadas, sobre todo de familiares"
Miles de estudiantes, llamados a manifestarse contra el bullying en todas las ciudades de España tras el caso de Sandra Peña
MadridEl suicidio de la menor Sandra Peña a raíz del acoso escolar que sufría ha provocado un ‘efecto mariposa’ en la sociedad española y es que, a veces, un solo caso se convierte en el detonante para que muchas personas que se encuentren en la misma situación den el paso a denunciar lo que están viviendo. Ya pasó con el caso de Ana Orante con las denuncias del maltrato, con el movimiento del ‘Me too’ del abuso sexual en actrices, ahora se ha producido un ‘Me too’ del bullying.
Desde que el pasado 14 de octubre la menor de 14 años Sandra Peña decidiese acabar con su vida por no soportar más el acoso que vivía día tras día por parte de unas compañeras de clase, una marea de jóvenes se ha atrevido a denunciar y pedir ayuda por encontrarse en una situación parecida a la de la joven sevillana.
El impacto que ha tenido en la opinión pública y el efecto mediático del suceso de la menor sevillana después de la inacción por parte del centro escolar, otras víctimas y familiares de estas han decidió no aguantar más y romper su silencio.
"Aumento de llamadas, sobre todo de familiares" buscando ayuda
Desde la Fundación ANAR de protección a los niños y adolescentes han podido constatar esa "sensibilización" a través de sus líneas telefónicas de ayuda. Informativos Telecinco ha hablado con Diana Díaz, directora de líneas de Ayuda ANAR, quien ha explicado que "estos últimos días hemos tenido un repunte, un aumento de llamadas, sobre todo de familiares". Padres y madres que no quieren que sus hijos terminen por quitarse la vida.
Familiares y menores acosados "que buscan ayuda" a través de los psicólogos expertos en la infancia y adolescencia que se encuentran al otro lado de los teléfonos de ANAR, 600505152 (para adultos) y el 900202010 (para los menores), las 24 horas del día y todos los días del año.
Diana Díaz reconoce que en su día a día "tenemos muchas llamadas, pero a raíz del caso han aumentado" considerablemente.
Además de los teléfonos de ayuda a los niños y adolescentes, las redes sociales también se han convertido en un altavoz para denunciar y señalar a los acosadores.

Crece el acoso escolar con respecto al curso anterior
En el último estudio elaborado por la Fundación ANAR a través de la entrevista a 8.781 escolares, un 12,3% de los estudiantes conoce algún caso de acoso escolar o lo sufre, incrementándose así respecto al curso anterior 2023-2024 que era de un 9,4%.
El incremento corresponde al crecimiento del acoso digital que se han duplicado con respecto al porcentaje del curso anterior.
En estas situaciones, los insultos, motes y burlas (84,8 %), seguido del aislamiento (44,8 %) que tiene gran impacto psicológico para la víctima, son los tipos de agresión más frecuente.
Además, el estudio refleja el aumento de la violencia física entre escolares: los golpes y patadas crecen 8,7 puntos porcentuales con respecto al año previo.
En cuanto a la duración de las situaciones de acoso escolar, el estudio refleja que la mayoría (42 %) se mantienen durante meses, pero que el 28,2 % se prolonga más de un año.

Huelga estudiantil contra el acoso y en memoria de Sandra Peña
Bajo el lema 'Sandra, no te olvidamos', el Sindicato de Estudiantes ha convocado una huelga para este martes 28 de octubre, en toda España en recuerdo de la joven sevillana para decir "Basta ya de bullying y de discursos de odio".
Además de la huelga habrá manifestaciones a las 12 del mediodía en numerosas ciudades españolas, según ha informado el Sindicato Estudiantil, que ha lamentado la muerte de la joven, una "terrible noticia que ha conmocionado a millones de jóvenes"
Un hecho, añaden, "que no tenía que haberse producido nunca", y del que "hay responsables".
Para ellos Sandra fue "víctima de un acoso continuado en el colegio concertado Irlandesas de Loreto donde estudiaba" y que "no motivó ninguna acción -por parte de este centro docente- para impedirlo", sin que en ningún momento se activaran los protocolos que existen.

Asimismo, han enviado todo su apoyo y cariño a la familia, amigos y amigas, a todos los compañeros y compañeras de Sandra, en estos momentos "tan duros". Y al mismo tiempo, remarcan, quieren "dejar claro que la pérdida de Sandra pudo haberse evitado".
Por su parte, el Sindicato de Estudiantes andaluz, apunta también como responsable de este suceso a "los recortes y las privatizaciones" tanto en educación pública como en el terreno de la salud mental.
Aunque muchos pongan el foco en los protocolos antiacoso, el sindicato ha recordado que quienes los aplican son "profesores que tienen que atender a 35 y 40 alumnos en un aula y sin medios" y los orientadores "que no hay en nuestros institutos".
"¿De qué sirven los protocolos cuando se tornan en papel mojado ante el colapso de la educación y la inexistencia de recursos económicos y mecanismos de prevención?", concluye la declaración publicada en las redes.
