Se estima que el presupuesto del evento nupcial del fundador de Amazon oscile entre 10 y 20 millones de dólares
Jeff Bezos, obligado a cambiar la ubicación de su boda en Venecia con Lauren Sánchez: el motivo y el lugar escogido
La boda de Jeff Bezos y Lauren Sánchez se perfila como el evento social del año. Aunque los detalles se mantienen bajo estricta confidencialidad, se sabe que durará varios días, entre el 24 y el 28 de junio, y tendrá lugar en localizaciones exclusivas de la ciudad, incluyendo la isla de San Giorgio Maggiore y parte del Arsenale, un antiguo complejo naval reconvertido en espacio cultural que ofrece mayores ventajas logísticas y medidas de seguridad.
Se espera la presencia de unas 250 personalidades del mundo de los negocios, el entretenimiento y la política, algunos como Oprah Winfrey, Leonardo DiCaprio, Kim Kardashian, Orlando Bloom, Matteo Bocelli y Lady Gaga. Ivanka Trump, hija de Donald Trump, ya se ha dejado ver en la ciudad italiana. La organización ha sido confiada a la prestigiosa empresa Lanza & Baucina, conocida por coordinar el evento nupcial de George Clooney.
Se estima que el presupuesto del evento oscile entre 10 y 20 millones de dólares, según diversas fuentes, aunque la pareja ha optado por contratar a proveedores locales para reducir el impacto ambiental y apoyar a negocios venecianos. Entre ellos, destacan talleres de vidrio de Murano, pastelerías históricas como Rosa Salva y una flota entera de taxis acuáticos eléctricos.
Pero en las últimas horas, y tras el arranque del llamado evento del año, se ha filtrado el diseño y contenido de la esperada invitación de boda, y lo cierto es que no ha dejado indiferente a nadie.
Más allá del lujo y la exclusividad que se espera de uno de los hombres más ricos del planeta, la invitación incluye un detalle inesperado: una sorprendente petición para los invitados en medio de la ola de protestas sociales y medioambientales en la ciudad italiana.
La invitación, que fue enviada el pasado mes de mayo, ha sido diseñada en tonos blancos y dorados, decorada con aves, mariposas y estrellas fugaces, reflejando así el estilo romántico y simbólico que la pareja ha querido imprimir a la boda. Pero el detalle más llamativo es el mensaje que acompaña al diseño: "Estamos emocionados de que te unas a nosotros. Tenemos una petición anticipada: por favor, sin regalos", señalan, tal y como muestra 'ABC News'.
En ella, se les pide a los invitados que renuncien a los regalos y, en su lugar, se enumeran tres organizaciones benéficas venecianas a las que Bezos y Sánchez donarán dinero en nombre de los invitados. "En cambio, estamos haciendo donaciones en tu honor y con gratitud por hacer el viaje para celebrar con nosotros en Venecia", se lee.
Asimismo, la multimillonaria pareja incluye tres organizaciones benéficas que tienen un significado especial para ellos. "Se están realizando donaciones en tu nombre al Comité Ejecutivo de la UNESCO en Venecia para proteger el patrimonio cultural insustituible de la ciudad; a CORILA, para restaurar los hábitats de la laguna que protegen el futuro de Venecia, y a Venice International University para apoyar la investigación y educación de soluciones sostenibles".
El objetivo es que otras parejas también puedan experimentar la magia de Venecia. "Este lugar mágico nos ha regalado recuerdos inolvidables. Nuestra esperanza es que, gracias a estos esfuerzos y a que te unas a nosotros, Venecia siga inspirando asombro para las generaciones futuras", concluye la misiva.
Las protestas
Pero no todo es glamour. En los días previos al enlace, la ciudad de los canales ha sido escenario de una creciente ola de protestas. Bajo el lema "No Space for Bezos", colectivos ciudadanos, ecologistas y grupos por el derecho a la vivienda han denunciado el uso de Venecia como "escaparate de los ultrarricos".
Los activistas critican que eventos de este calibre intensifican el fenómeno del turismo masivo, desplazan a los residentes locales y agravan la crisis habitacional. Algunas pancartas rezaban: "Si puedes alquilar Venecia para tu boda, puedes pagar más impuestos", o "El amor no necesita desalojos".
En respuesta, los organizadores han tomado medidas discretas: cambiaron el lugar principal de la ceremonia del centro histórico al Arsenale, evitaron la entrada de los megayates Koru -de 500 millones de dólares- y Abeona al Gran Canal y reforzaron la seguridad privada para evitar altercados.
El dispositivo de seguridad de la boda está controlado por agencias privadas que coordinan con las autoridades locales y gestionan discretamente el acceso a islas, palacios y embarcaderos reservados. La policía ha estado controlando también el aeropuerto más cercano a Venecia.
A pesar de esto, se prevén manifestaciones durante los días de la boda, algunas de ellas en góndolas y botes inflables, como forma simbólica de protesta contra la privatización del espacio público y el impacto medioambiental de los grandes eventos.