Harvard cede a las presiones de Trump: cambia el nombre de su departamento de diversidad e inclusión para no perder los millones de financiación

Trump gana el pulso a la universidad de Harvard a la que ha acusado de antisemita, comunista y de atentar contra la democracia. El prestigioso centro de estudios e investigación ha cambiado el nombre de su departamento de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI), por la presión del presidente de Estados Unidos que ha congelado parte de sus fondos federales y ha amenazado con más represalias económicas.

La directora de la antigua oficina del DEI, Sherri Ann Charleston ha informado a estudiantes y miembros de la institución en un correo electrónico divulgado este martes por la prensa,, que este departamento pasará a llamarse, con efecto inmediato ‘Community and Campus Life Officer’ (‘Vida en la Comunidad y en el Campus’).

Charleston, al citar las palabras del presidente de Harvard, Alan Garber, afirmó que los miembros de la entidad deben "fomentar una comunidad que acoja la diferencia" y, al mismo tiempo, cumplir con una ley que prohíbe que las universidades tomen decisiones "en función de la raza".

Harvard busca fomentar inclusión sin discriminar

La directora de este departamento ha subrayado la necesidad de reunir a personas "de diferentes orígenes, experiencias y perspectivas en una sola comunidad, centrándonos en las experiencias y contribuciones únicas de cada individuo y no en los amplios grupos demográficos a los que pertenecen".

La Administración de Donald Trump congeló a mediados de abril 2.200 millones de dólares en fondos federales para Harvard, después de que la institución rechazara la demanda del Gobierno de que ponga a fin a sus programas de diversidad y vigile la orientación ideológica de sus estudiantes extranjeros.

Está previsto que la primera audiencia de este caso judicial sea el próximo 21 de julio, cuando ambas partes harán sus alegatos iniciales en un tribunal de Boston.

Harvard cancela los eventos culturales de estudiantes extranjeros

Charleston también ha informado en otro correo electrónico, que el centro ya no financiará unos eventos en los que alumnos de diversas comunidades y grupos étnicos se reúnen para celebrar su cultura antes de graduarse, según informó el periódico universitario, The Harvard Crimson.

El Departamento estadounidense de Educación había amenazado a la universidad con hacer más recortes en sus fondos federales si se seguían celebrando estas reuniones, que ahora también elimina.

Harvard es una de las universidades que ha perdido parte de su financiación federal por informes del "Grupo de trabajo federal para combatir el antisemitismo", creado por Trump, por aplicar políticas de ‘discriminación positiva’ o por no dar cabida a lo que el Gobierno califica de "diversidad de ideas".

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